Las melodías pueden influir hasta en tus momentos de mayor concentración y así puedes aprovechar estos géneros a tu favor
Agencias
México
La música, esa compañera inseparable que nos envuelve en un abrazo sonoro en los momentos más diversos de nuestras vidas, se convierte en una aliada aún más poderosa cuando nos sumergimos en el mundo del estudio y la concentración. Y es que las melodías no sólo pueden ayudarnos a descifrar nuestros sentimientos, sino que también podría ser la clave para mejorar nuestra forma de trabajo, sólo es necesario encontrar el género perfecto para cada quién.
¿Cuáles son los mejores géneros musicales para escuchar mientras estudias?
Aunque la música parece ser algo superficial, incluso la ciencia ha comenzado a estudiar su repercusión en la mente, concluyendo que el impacto de ésta es aún mayor de lo que se pensaba, ya que una investigación llevada a cabo por la Facultad de Medicina de la Universidad de Stanford señaló que la capacidad de concentración y memoria puede mejorar cuando se escuchan ciertos géneros musicales.
Los científicos de la universidad señalaron que el acompañamiento musical durante las sesiones de estudio o trabajo pueden impactar en el cerebro y uno de los géneros que podrían lograr esto es la música barroca, señalando que las composiciones relajantes, especialmente las obras de Mozart, son particularmente efectivas para el estudio. Pero además de la música, también se ha reconocido la eficacia de los sonidos naturales y serenos para facilitar el proceso de aprendizaje.
En este contexto, la música ambiental emerge como una opción destacada, con sus suaves melodías y armonías extendidas que crean un ambiente tranquilo y libre de distracciones, funcionando como un puente entre el silencio absoluto y el bullicio cotidiano, permitiendo que la mente se enfoque sin perturbaciones externas. Esto lo hace ideal para quienes odian estar en silencio, pero terminan dando un concierto a sus cuadernos cuando su playlist comienza a sonar en aleatorio.
Por otro lado, la música clásica ha sido durante mucho tiempo una compañera inseparable de estudiantes y académicos, debido a su complejidad y riqueza emocional que contribuyen a mejorar el rendimiento cognitivo y la concentración. Sin embargo, para ciertas tareas que requieren una atención extrema, su complejidad puede llegar a ser distractiva.
Y para quienes buscan algo menos tranquilo, el estudio ha señalado también que el rock instrumental destaca por su falta de letras y su enfoque en la melodía y la energía, por lo que puede resultar especialmente útil para acompañar momentos de estudio o trabajo, gracias a su carácter estimulante y motivador, siendo ideal para tareas más mecánicas o menos complejas.
¿Por qué estos géneros de música ayudan a concentrarse?
De acuerdo con expertos de la Facultad de Medicina de la Universidad de Stanford, la estructura y el ritmo de estos géneros a menudo son consistentes y predecibles, lo que puede ayudar a sincronizar el ritmo cardíaco y respiratorio, facilitando así la concentración. La música clásica y barroca, en particular, con su complejidad armónica y emocional, puede estimular áreas del cerebro asociadas con el procesamiento cognitivo y la memoria.
Además, los géneros instrumentales, como el jazz y el rock instrumental, carecen de letras vocales, lo que reduce las distracciones verbales y permite que la mente se enfoque en la tarea en cuestión, esto es especialmente útil para actividades que requieren una atención sostenida y profunda. Por otro lado, la música ambiental y los sonidos de la naturaleza, como el viento o el agua, crean un ambiente sonoro tranquilo y pacífico que puede reducir el estrés y la ansiedad, facilitando así la concentración y la relajación mental durante el estudio.
La elección de la música para el estudio es, indudablemente, una cuestión de preferencia personal y puede variar según las personas y el tipo de tarea que se esté realizando, por ello, es fundamental experimentar con diferentes géneros, ritmos y estilos ya que esto puede ayudarnos a descubrir qué funciona mejor para nosotras y a crear el ambiente auditivo óptimo para potenciar nuestra concentración, memoria y rendimiento académico o laboral.
Nota tomada del Heraldo de México