El uso de celulares, las presiones escolares y la falta de horarios pueden afectar la forma en que se duerme a esta edad
Agencias
México
La adolescencia no es solo una etapa importante en términos formativos socialmente, también lo es en el sentido del desarrollo del organismo, pues es cuando suceden algunos de los cambios metabólicos y hormonales más importantes.
De hecho, es durante esta etapa, comprendida entre los 12 y los 21 años de edad, cuando se consolidan millones de conexiones neuronales, se activan las hormonas del crecimiento y se define el carácter.
“Por regla general, los adolescentes duermen muchas menos horas de las que necesitan, y esto es un reflejo de los nefastos horarios de nuestra sociedad, de los malos hábitos y del menosprecio histórico hacia el sueño”, argumenta el doctor Javier Albares.
Son precisamente los hábitos cotidianos los que permitirán que los jóvenes puedan darle la tranquilidad necesaria a su cuerpo para que éste se pueda desarrollar de manera correcta, gracias al descanso adecuado.
Menos celular, más disciplina
De acuerdo con Albares, quien es miembro de la Sociedad Europea del Sueño, reducir el uso del celular a lo largo del día y, especialmente, horas antes de irse a dormir, puede ser la clave para un sueño satisfactorio.
“Hay que limitar el tiempo total de uso de los dispositivos durante el día para evitar crear una adicción. No solo es importante no usar los dispositivos electrónicos entre una y dos horas antes de acostarte, el tiempo total de uso durante el día también puede afectar al sueño nocturno”, recomienda.
De acuerdo con datos proporcionados por el galeno, hasta 95 por ciento de los jóvenes suelen usar su teléfono celular o dispositivo móvil incluso en la cama, lo que puede dificultar conciliar el sueño.
Tener horarios bien definidos para cenar y promover la práctica de actividades relajantes antes de dormir, tales como ver una película, leer un libro o escuchar música, es ideal para conciliar mejor el sueño.
El consumo de alimentos procesados y tipo chatarra, algo común en la adolescencia, también puede fomentar problemas a la hora de querer conciliar el sueño. Opta por alternativas saludables tanto para comidas como para snacks.
Por último, realizar actividades deportivas ayudará a que la energía en los adolescentes se gaste de forma adecuada, permitiendo que los jóvenes tengan un descanso reparador durante la noche.
Nota tomada del Heraldo de México