Sigue estos sencillos tips para quitar este malestar de tu mascota
Agencias
México
El estrés no es exclusivo de los humanos, nuestras mascotas también pueden sufrirlo. Los perros pueden experimentar ansiedad debido a diversas razones, como cambios en su entorno, ruidos fuertes o situaciones nuevas. Afortunadamente, el masaje es una técnica efectiva para ayudar a tu perro a relajarse y sentirse más tranquilo.
Algunas alertas comunes para detectar que tu perro está estresado es el jadeo excesivo, temblores, orejas hacia atrás, colas entre las piernas y cambios en el comportamiento habitual. Si notas que tu perro muestra alguno de estos signos, es probable que esté experimentando estrés.
Masajes relajantes para tu perro
Para que tu perro pueda relajarse completamente durante el masaje, es esencial crear un ambiente tranquilo. Encuentra un lugar silencioso y cómodo, lejos de distracciones y ruidos fuertes. Puedes poner música suave o sonidos de la naturaleza para ayudar a crear una atmósfera relajante. Asegúrate de que el lugar esté limpio y que tu perro se sienta seguro y cómodo.
Una de las técnicas más efectivas y simples para calmar a tu perro es el masaje de orejas. Utiliza tus dedos índice y pulgar para hacer movimientos circulares suaves en la base de las orejas. Este tipo de masaje promueve una sensación de bienestar y relajación.
Otro masaje consiste en realizar el masaje desde la cabeza y ve bajando lentamente hacia la cola. Utiliza movimientos largos y suaves, aplicando una presión moderada. Presta atención a las áreas donde tu perro parece disfrutar más el masaje y enfócate en esos puntos.
Las patas de los perros también pueden acumular tensión, especialmente si han estado muy activos. Sujeta una pata suavemente y utiliza tus dedos para masajear entre los dedos y las almohadillas. Este masaje no solo ayuda a aliviar el estrés, sino que también puede mejorar la circulación sanguínea en las extremidades.
La espalda es otra área donde los perros tienden a acumular tensión. Con la palma de tu mano, realiza movimientos largos y suaves desde el cuello hasta la base de la cola. Puedes variar la presión dependiendo de la respuesta de tu perro, asegurándote de mantener un ritmo constante y relajante.
Nota tomada del Heraldo de México