Se trataba de muñecos extremadamente realistas con fines terapéuticos.
Policía de Sheffield Lake, Ohio, detuvo a una mujer acusada de tráfico de personas tras recibir una denuncia anónima. No obstante, cuando el sargento Frank Goscewsk acudió al domicilio de Kathy Cadle, se llevó una enorme sorpresa.
El oficial halló muchos bebés, pero de juguete, ya que tanto Kathy como su hermana Rachel Smith fabrican muñecos de vinilo extremadamente realistas y las venden en su página de Facebook bajo la marca Bunny Bundles Reborns.
Las creaciones de su negocio se usan para fines terapéuticos por pacientes con demencia o alzhéimer. Las féminas tuvieron que mostrarle al policía varios de los juguetes para convencerlo de que no eran de carne y hueso. La tienda continúa abierta y es totalmente legal.
Con información de RT.