Agencias / Xalapa, Ver.- (AVC/Valeria Ramos) Los Servicios de Salud de Veracruz enfrentan un presunto daño patrimonial de 42 millones de pesos en la cuenta pública 2023, según las observaciones del órgano de fiscalización de Veracruz.
Entre los señalamientos, destaca una compra de 32.8 millones de pesos en vestuarios, uniformes y blancos a la empresa Toka Internacional, la cual no pudo ser comprobada. De acuerdo con los auditores, estas compras carecen de facturas, y aunque la Secretaría de Salud presentó documentación aclaratoria, no fue suficiente para resolver la observación.
Asimismo, se reporta un posible daño patrimonial de 7.8 millones de pesos por pagos a auxiliares de salud que no fueron justificados con la documentación correspondiente.
Por otro lado, la Secretaría de Salud reintegró 77.8 millones de pesos por recursos no utilizados, destinados a programas como Insabi, prevención de adicciones y protección contra riesgos sanitarios.
Los auditores también señalaron irregularidades en obras públicas, con pagos en exceso, mala calidad y retrasos. Entre las obras observadas se encuentran:
- Centro de salud en Juan Rodríguez Clara:: pagos en exceso y obra inconclusa.
- Centro de salud en Dos Amates, Catemaco: deficiencias técnicas y mala calidad.
- Centro de salud en Salinas Roca Partida, San Andrés Tuxtla: pagos en exceso.
- Centro de salud en Cuitláhuac y hospital en Cerro Azul: deficiencias técnicas y mala calidad.
En seis de las 22 obras revisadas, los auditores detectaron incumplimientos en la ejecución, lo que impide que cumplan con el objetivo principal de brindar los servicios para los cuales fueron construidas.
Además, se identificaron retrasos en la rehabilitación del Centro de Alta Especialidad Dr. Rafael Lucio y el Hospital Regional Dr. Luis F. Nachón, en sus áreas de urgencias y patología.