- Señalan vacío para evitar sobrerrepresentación.
PERLA SANDOVAL/AVC NOTICIAS
XALAPA, VER.- La bancada de Morena en el Congreso de Veracruz podría alcanzar los 31 diputados tras la adhesión del ex petista Luis Vicente Aguilar Castillo, aunque oficialmente la ley establece que ningún partido puede exceder ese número debido al límite de sobrerrepresentación.
Actualmente, Morena cuenta con 30 diputados, pero con la licencia solicitada por algunos legisladores que participarán en el proceso electoral municipal, se generarán movimientos que, según integrantes de la fracción, no violarían la norma.
Uno de los casos que ha abierto la puerta a esta maniobra es el del diputado Alejandro Porras Marín, nombrado promotor de la Cuarta Transformación en Huatusco, quien dejaría vacante su escaño. Su suplente, Luis Fernando Cervantes Cruz, actualmente es director de la Comisión de Agua del Estado de Veracruz (CAEV), y no asumiría el cargo.
Ante esto, el coordinador de la bancada de Morena y presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), Esteban Bautista Hernández, afirmó que el lugar quedaría “acéfalo”, es decir, sin representación temporal.
“Tengo entendido que quien está en la CAEV no va a asumir la responsabilidad y vamos a quedar acéfalo ahí”, explicó.
En ese escenario, se anunció la adhesión de Luis Vicente Aguilar Castillo, ex diputado del Partido del Trabajo (PT), a la bancada de Morena, lo cual llevaría a la fracción a tener 31 integrantes activos.
Al ser cuestionado sobre si esto representa una forma de burlar el límite legal de sobrerrepresentación, Bautista Hernández respondió que ese análisis se hará después del proceso electoral.
“Platicamos después de la elección. No hemos visto si ganan o no ganan, ahorita está al aire”, dijo.
Sobre la incorporación de Aguilar Castillo, subrayó que el legislador es libre de unirse al movimiento.
“El compañero es libre de ingresar a nuestro movimiento, aquí todo el mundo tiene la libertad”, afirmó.
La sobrerrepresentación en los Congresos locales es un tema regulado por la legislación electoral, con el objetivo de mantener el equilibrio entre el número de votos obtenidos por los partidos y el número de escaños que ocupan. Sin embargo, este tipo de movimientos generan cuestionamientos sobre la legalidad de las estrategias partidistas en temporada electoral.