Coatzacoalcos, Ver.- Mauricio Ramírez Ramírez, presunto multihomicida de tres elementos de la Policía Municipal de las Choapas, fue dejado en libertad por un juez que desechó las acusaciones, al ser infundadas; el detenido estaba ya internado en el penal; pero la familia siempre expuso que era un chivo expiatorio.
Cerca de las 10:00 PM del lunes, el juez ordenó la liberación inmediata de dicha persona, quien además debe ser regresado al hospital de inmediato ante las lesiones que presenta, las cuales fueron causadas en un pleito de cantina, y no por un elemento de la policía de Las Choapas intentando escapar, como acusó la Fiscalía.
“El operativo táctico de inteligencia fue desplegado en la ciudad de Coatzacoalcos, donde se hizo efectiva la orden de aprehensión girada por el Juez de Control radicado en ese distrito judicial, en contra de Mauricio “N”, quien de inmediato fue puesto a disposición de la autoridad que lo reclama”, informó la Fiscalía el pasado primero de febrero.
Pero para la audiencia de vinculación de proceso contra del acusado de “homicidio de tres elementos policiacos”, “tentativa de homicidio en agravio de un cuarto agraviado” y “ultrajes a la autoridad y robo agravado”, el juez analizó todas las pruebas presentadas por el personal de Winckler, y las desechó, ordenando la inmediata liberación del detenido.
En el comunicado de la fiscalía, del pasado primero de enero, se abundó:
“Dentro del Proceso Penal 31/2017, (a Mauricio Ramírez) se le imputa la probable comisión de los delitos de homicidio calificado cometido en agravio de quienes se identifican con las iniciales B.M.A., A.N.A. y A.C.L.; asimismo, tentativa de homicidio en agravio de J.A.M.Z.; ultrajes a la autoridad en agravio de la función pública y robo agravado en perjuicio del patrimonio de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) y/o quien resulte ser propietario de diversas armas de fuego sustraídas a los hoy occisos”.
Durante la protesta en su natal Pajapan, ubicado a unos 40 minutos de Coatzacoalcos, las familias expresaron su malestar contra la Fiscalía, por haber ordenado la detención de un simple campesino, para echarle la culpa de delitos cometidos por verdaderos delincuentes que andan sueltos.