* Lo cual se traduce en una mayor recaudación de impuestos de parte del gobierno
Facundo Bartolo Salazar
Martínez de la Torre, Ver.- Hay avances en el combate a la defraudación fiscal, lo cual se traduce en una mayor recaudación de impuestos de parte del gobierno, gracias a que las autoridades hacendarias han buscado corroborar el correcto pago de los impuestos a los que está obligado el contribuyente, expresó Javier Hernández Olarte, titular de un despacho contable.
Reconoció que “durante los últimos años las autoridades fiscales han perfeccionado sus métodos, desde la factura electrónica, el buzón electrónico y ahora judicializando la relación contribuyente-autoridad”. Mencionó que cuando las autoridades fiscales aleguen la inexistencia de las transacciones de una empresa, puede atenderse a un parámetro objetivo que puede demostrar que las operaciones si cuentan con materialidad, como lo es la sustancia económica de las transacciones.
Añadió que en ese contexto, la sustancia económica de las operaciones no es el único elemento que puede demostrar la existencia efectiva de las transacciones de que se trate, debiéndose valorar que también existen aspectos subjetivos, como lo es la razón de negocios, entendida como un propósito.
Hernández Olarte explicó que, a pesar de que los conceptos de “materialidad”, “razones de negocios” y “sustancia económica” no están definidos ni previstos en la legislación fiscal, existen algunos precedentes judiciales aislados mediante los cuales los tribunales han convalidado el uso de esos conceptos para desconocer los efectos jurídicos de ciertas transacciones, rechazando el efecto fiscal pretendido por el contribuyente.
Enfatizó que los bienes adquiridos o los servicios recibidos deben ser existentes, genuinos y deben traducirse en algún valor económico para el particular, el cual debe guardar una relación razonable con el cambio en la esfera jurídico patrimonial, de tal manera que se justifique el efecto fiscal favorable al contribuyente, ya sea que se trate de deducción, acreditamiento o cualesquiera otro.
Opinó que, en general, los contribuyentes deben estar preparados para esta nueva relación con las autoridades fiscales, pues de no ser así, pueden tener graves problemas, no solo económicos sino penales. Consideró que conocer el ámbito en el que se desenvuelven los negocios es fundamental hoy en día, y en ese ámbito se debe contar con la asesoría adecuada con el fin de evitar grandes riesgos.
