Niños no tienen por qué ser violentados
Brenda Pérez Aguilar
Después de ocho años de intenso trabajo, alumnos de la fundación Down Ángeles del Mundo A.C. iniciaron este ciclo escolar en sus propias y nuevas instalaciones, ubicadas en la comunidad El Cañizo.
“Aunque las instalaciones son importantes y agradecemos el apoyo de todas las personas que nos han apoyado, lo es aún más, el mejorar la calidad de vida de nuestros pequeños con síndrome de Down, porque hemos observado que cada quien en su etapa de madurez están leyendo en primera, segunda y tercera etapa, pero todos están avanzando gracias al esfuerzo de los papás, maestros y están logrando este sueño”, expresó la presidenta de la fundación Down Ángeles del Mundo A. C., Mariza de Jesús Campos Rincón.
Explicó que aunque su proyecto de construcción todavía no termina, porque son tres etapas y está es la primera, con el apoyo de la población en un año dos meses están a punto de concluirla, pues aún les faltan los vidrios para las ventanas y el piso para un aula, las cuales son muy amplias y bien ventiladas, no obstante hoy iniciaron sus actividades aunque todavía no inauguren su escuela, ni el ciclo escolar.
Campos Rincón enfatizo que ya están en sus propias instalaciones, hoy ya están preparados y ya pueden recibir a más niños, porque tienen al personal capacitado y el espacio ahora ya es más amplio, pues cuando estaban en el Club Rotario, el lugar era más pequeño.
“Hoy tenemos 42 niños, algunos se van a incorporar hasta el próximo lunes a nuestras instalaciones y vamos a seguir trabajando para concluir al 100% la primera etapa, porque todavía tenemos mucho por delante en beneficio de nuestros pequeños”, remarcó.
Niños Down tiene los mismos derechos
Todos los niños Down tienen los mismos derechos y obligaciones de cualquier otro y no tienen por qué ser violentados, ni por sus papás o por terceras personas, de lo contrario existen las instancias correspondientes que tienen que hacer valer esos derechos.
Apuntó que no puede juzgar a los padres de familia, porque atrás de ellos hay muchas situaciones que los obligan a descargar su energía negativa con los niños y ahí los pueden apoyar, a descargar su energía para que ellos apoyen correctamente a su hijo.
En el caso de la fundación, aquí se maneja un esquema, remarcó, buscan el origen de la actitud negativa de los papás, porque a veces tienen deudas, fueron maltratados por terceras personas o sufrieron de violencia y traen todo este esquema difícil que repercute en los niños.
“Fundación Down realiza visitas domiciliarias mínimo dos veces al año para ver cómo se encuentran los niños en su hogar, para saber cómo se comportan, que apliquen todo lo que aprenden en la escuela, porque llevamos una materia que se llama Autocuidado y ahí nos exigen hacer estas visitas para lograr los resultados en nuestros alumnos, con el apoyo de los papás”, concluyó.