
* Definitivamente podrían provocar hasta la muerte, tan solo en un descuido, dada la falta de conciencia y conocimientos
Facundo Bartolo Salazar
Martínez de la Torre, Ver.- Los padres de familia deberían advertir a sus hijos sobre nuevas drogas y sus peligros, pues definitivamente podrían provocar hasta la muerte, tan solo en un descuido, dada la falta de conciencia y conocimientos específicos en relación a los efectos, muchas veces muy potentes, que tienen sobre el organismo humano, que en su momento ya no le es posible soportar, expuso Gastón de la Rosa Gutiérrez, médico.
Señaló que “más allá de las cuestiones morales, pues cada quien sabe lo que hace con su familia, es urgente tener conocimiento de lo que puede pasar al consumir drogas, sobre todo las nuevas que se están volviendo muy populares como el fentanilo, que es muy peligroso, en comparación con drogas tradicionales como mariguana, cocaína, heroína o morfina”.
En ese sentido, resaltó que el fentanilo es sumamente adictivo por su potencia, ya que basta con microgramos para provocar un efecto poderoso en el cuerpo, y su consumo elevado provoca hasta la muerte. Asimismo, dijo que de acuerdo con información disponible, esa sustancia sintética es hasta 50 veces más fuerte que la heroína y 100 veces más fuerte que la morfina, aun cuando es de venta legal con receta médica, y es seguro cuando se toma según lo prescrito por un médico para tratar el dolor intenso.
De la Rosa Gutiérrez dijo que con lo anterior se puede tener una idea de lo peligroso que puede ser el fentanilo entre los jóvenes, deseosos de nuevas experiencias, y sobre todo sin la guía de sus padres y demás familiares sobre el uso de sustancias tan potentes. Insistió en que frente a esa droga, la mariguana y la cocaína pueden parecer hasta inofensivas, pues aun cuando estas también dañan el organismo, su efecto es más retardado.
Añadió que otro problema es que dicha sustancia es barata, por lo que es de más fácil acceso y su distribución puede ser más inmediata, de tal manera que solamente la labor de los padres de familia puede evitar que los jóvenes caigan en esas nuevas adicciones que en corto tiempo pueden resultar fatales.