Álvaro Guerrero
Por la sequía que se presentó durante los meses de mayo y junio, la producción citrícola, principalmente de limón persa, disminuyó para esta temporada, confirmó Modesto Toral, productor de la zona, de lo que aguarda que esta situación mejore con la presencia de las lluvias.
Aunque existe este problema, comentó que el panorama no es tan grave para el sector, ya que existe precio, de lo que es un respiro favorable para los productores, además, que ayuda a soportar las condiciones que se presentan en esta temporada.
Para este segundo semestre del año, vislumbra que exista una buena proyección, de lo que aguarda que el precio por kilo no baje de los veinte pesos hasta que culmine el 2023, asimismo, vaticinó que durante los primeros meses para el 2024 sean de buenos precios, aunque estos no sean históricos como los anteriores.
Por último, destacó que el limón persa que ha crecido la demanda de adquisición a nivel mundial por este frutal, incluso, señaló que ha rebasado el nivel de producción, es por ello, que la citricultura sigue siendo un cultivo rentable, a pesar que cada vez más hay estados que se encuentra sembrando este frutal.