Álvaro Guerrero
Desde el cierre del 2023 el precio del limón persa se ha mantenido bajo, por lo que esta situación prevalecerá en las primeras semanas de este nuevo año, a pesar que existe una escasez de producción en esta temporada, opinó Valentín López Cruz, representante de los Citricultores Unidos de la región.
En ese contexto, comentó que, “bajo, ciento ochenta pesos una caja de limón ahorita en temporada en que definitivamente no hay producción, pues a ciento ochenta pesos, comentaba que los empacadores se aprovechan de la situación de los citricultores”.
Durante estas fechas, los empacadores aprovechan especular los precios de la fruta cítrica, de lo que dicho problema afecta a los pequeños productores que tienen la esperanza de vender sus cosechas a un costo alto para poder celebrar el 24 y 31 de diciembre.
Agregó que, “el precio no estuvo como en otros tiempos, estuvo un poquito bajo el precio de limón, sobre todo no hubo una gran producción, en un tiempo estuvo a quinientos pesos la caja, pero de ahí para allá, los empacadores ya saben cómo manejar a los citricultores para que corten su limón un día lo ponen a un precio alto para que al otro día los citricultores vayan con la ilusión de permanecer alto, pero lo bajan rotundamente”.
Ese juego del desbalance de los precios es constante por parte de los empacadores, de lo que ocasiona que los productores no lleguen a tener una rentabilidad en la comercialización de su producción, pues refiere que estos tienen que pagar personal de corte y el traslado para la comercialización de la fruta.
La problemática permanecerá hasta que exista una iniciativa por parte de las autoridades en que el campo sea valorado, por lo mientras los empacadores seguirán aprovechándose de ellos.