En lugar de construir nuevas plantas nucleoeléctricas o reactores, la CFE debe considerar opciones más limpias
Facundo Bartolo Salazar
La energía nuclear representa un riesgo innecesario para producir electricidad, en comparación con opciones más limpias como la energía eólica, geotérmica e hidroeléctrica, aclarando que les sigue la termoeléctrica, pero utilizando gas como combustible, la cual sería perfectamente factible a lo largo de todo el Golfo de México, desde Campeche hasta Tuxpan o Tampico, donde se localizan explotaciones petroleras, expuso Federico Pérez Gómez, integrante del Consejo Consultivo Ciudadano de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Apuntó que en el Golfo de México existen miles de pozos petroleros en los que se quema el gas que liberan en el proceso de extracción, el cual bien pudiera ser entubado y conducido a través de un gran gasoducto que alimentaría a una serie de plantas generadoras, quizá al mismo costo que colocar dos nuevos reactores nucleares en la Planta Nucleoeléctrica de Laguna Verde, un proyecto que contempla la CFE, de la misma forma que construir una nueva planta de ese tipo, con dos reactores más en el estado de Veracruz. Reconoció que las plantas termoeléctricas a base de gas si encierran riesgos, pero serían menores a las nucleoeléctricas.
Pérez Gómez destacó que al mencionar los riesgos que representan las plantas nucleares es necesario recordar el desastre de Chernóbil, una población rusa que hasta la fecha continúa desierta y con secuelas de la contaminación radiactiva, después de décadas del accidente que ocasionó muchas muertes, enfermos y descendientes de los pobladores con problemas genéticos. También se refirió a la fuga radiactiva que inició hace un par de años en Japón por plantas nucleoeléctricas, situación que está contaminando todo el Océano Pacífico, desde Alaska hasta Magallanes.
El entrevistado insistió en que resulta innecesario tener ese tipo de materiales y desechos radiactivos tan cerca de la población, cuando es claro que existen otras posibilidades de generar electricidad como son la cantidad de ríos en el estado de Veracruz, los cuales pueden llenar los vasos o las tinas de plantas hidroeléctricas que pudieran ser instaladas en tales afluentes, representando opciones más limpias.
Comentó que con la planta de Laguna Verde se ha demostrado que esa tecnología produce energía eléctrica, no obstante, opinó que es un problema grave disponer de los desechos radiactivos que produce. Dada la situación, dejó entrever que esos desechos podrían afectar en su momento a los poblados cercanos, a los campesinos, industriales y demás personas, quienes por ese hecho deberían estar incluso asegurados, protegidos en su vida, sus inversiones, además de la naturaleza alrededor de la planta.
Por lo anterior, Federico Pérez consideró que la Secretaría de Energía, la CFE, la Secretaría de Hacienda y el Gobierno Federal deberían firmar un contrato de aseguramiento con toda la población circundante a la planta de Laguna Verde y a otras plantas que se tengan proyectadas en el estado de Veracruz. Esto con la finalidad de que, ante una posible contingencia, sería posible enfrentar pérdidas que definitivamente dejarían devastados a los habitantes de las cercanías de Laguna Verde o incluso de toda la zona.
