Álvaro Guerrero
El desinterés que tienen los empresarios para la regularización de los precios en Martínez de la Torre, han hecho que la organización de la Industria de la Masa y la Tortilla deje de funcionar, como resultado de la falta de implementación del reglamento entre ellos y los nuevos industriales.
La creación de nuevas tortillerías y mototortilleros hacen que la competencia sea desleal en colonias y comunidades, dejando ganancias bajas a los establecimientos que llevan años vendiendo su producto, y al no haber acuerdos entre los industriales hace que el precio de la tortilla varíe de una a otra.
De acuerdo al reglamento realizado en el 2006, las industrias de la tortilla no se podrían instalar a más de 500 metros de otra existente, para dar una apertura a un nuevo establecimiento solamente se podía dar en aquellas comunidades y colonias que les faltara la producción del insumo.
Por su parte, quien fungía como presidente de la Industria de la Masa y la Tortilla menciona que algunos industriales por su propia cuenta no han tenido la iniciativa de pertenecer a la organización, como consecuencia prefieren dar barata la tortilla, vender mucho y sin importar que ninguno tenga ganancias, que al final de cuentas terminan en la quiebra.
Los servicios que dan los repartidores no son los adecuados al último reglamento y a las normas sanitarias de la región, por ejemplo, son pocos los que llevan un logotipo del establecimiento en el papel que va envuelto y la fecha de caducidad por parte de la industria.
Estos son pequeños detalles que generarían una mayor seguridad del producto que se reparte y conocer a qué establecimiento pertenece, si realmente cumple las normas de higiene y calidad.