Con el afán de colocar créditos y hacer negocio argumentan que en su caso no pagarían ni un centavo
Facundo Bartolo Salazar
Los propios empleados de algunas financieras inducen al fraude a los clientes, principalmente haciéndoles creer que el dinero de los créditos que reciben está asegurado, que son recursos del gobierno o que se van a fondo perdido y que no habría ningún problema en caso de no liquidar sus adeudos por retrasos, situación que definitivamente afecta a las citadas empresas al incurrir los sujetos de crédito en delitos que los pueden llevar incluso a la cárcel, expuso Mauro Alvarado Loranca, titular de un despacho de cobranza.
Señaló que en ocasiones se genera desinformación entre las personas en relación a los adeudos que tienen con bancos y empresas que otorgan créditos, pues principalmente en estas últimas los promotores incurren en malas prácticas durante la colocación de créditos, con la finalidad de lograr sus comisiones.
Dijo que de esa manera es posible encontrarse con personas que afirman que los propios trabajadores de las financieras les indican que los recursos que reciben son a fondo perdido y que en su caso no pagarían ni un solo peso, lo cual es un error. Lo anterior, sabiendo que las deudas se tienen que pagar, tal como queda establecido en los documentos que firman quienes solicitan créditos.
Alvarado Loranca insistió en que los adeudos no están asegurados, sino que los seguros aplican en cuentas de ahorro, mismas que al ser abiertas se les pide a los titulares que adquieran un seguro de vida cuyo valor es proporcional al monto depositado.
En ese ámbito, no descartó la posibilidad de que los adeudos con financieras también se extingan, pero eso sucedería solamente con la muerte de los sujetos de crédito, en caso de haber contratado el seguro correspondiente para que las deudas queden canceladas y además se otorguen gastos funerarios de los posibles finados.
Comentó que es común encontrar personas que actúan de mala fe y solicitan créditos que no pagan, corriendo con la suerte de no haber tenido problemas legales, no obstante, advirtió que cuando ese tipo de personas llegan a cometer un fraude, sus ilícitos caen en el ámbito penal y en su momento pueden llegar a ser encarceladas.
Recomendó entonces que las personas no se dejen llevar por la desinformación que existe, sobre todo ante la evidente necesidad de recursos que impera, pues definitivamente pueden incurrir en ilícitos que empeorarían su situación en lugar de mejorarla, en un afán de hacerse de dinero fácil.