Álvaro Guerrero
Con las exigencias del mercado internacional de exigir que el producto natural empiece a tener un certificado de origen, se estima que en 3 o 5 años se lo estén exigiendo a los productores de limón persa que en sus huertos estén totalmente certificados para poder vender su producto y que sea ofrecido en el mercado internacional, indicó el director del Consejo de Productores y Exportadores de Limón Persa (COPELP) Marcelino Bustos Castillos.
Explicó que, “las tendencias de las certificaciones de inocuidad, en los países a donde mandamos el limón de Martínez de la Torre, cada vez más son exigentes, cada vez más están cerrando el círculo, ahora te pide desde de qué huerta es el limón, y con la nueva tecnología de comunicación te piden que mandes con el celular las coordenadas de la procedencia”.
De lo cual tarde o temprano, los productores se verán obligados a que sus hectáreas deban tener el certificado del huerto, puesto que el único fin que tiene el mercado internacional es conocer que el producto que se cultiva pasa las pruebas de inocuidad, ya que quieren cuidar su salud.
Precisó que existen varias etapas para llegar a la certificación, que la primera se trata en que el productor de a conocer la ubicación de su hectárea de fruta, qué fertilizantes y herbicidas ha ocupado en la tierra, cuánto ha tenido de la producción, todo esto registrado dentro de una bitácora que deben llevar.
Refirió que en los próximos días, el consejo de productores estará impartiendo cursos de capacitación a los citricultores de los diversos ejidos y comunidades que existen en la región, con el único fin de que conozcan cómo llevar una bitácora dentro de la producción de su huerta.
Indicó que los primeros pasos para tener la certificación no son tan costosos como se ha mal informado entre los mismos productores, puesto que con las pláticas que estarán ofreciendo en las siguientes semanas se aclararán todas las dudas que tienen los citricultores en el tema.
En el tema de denominación y certificación de origen, aclaró que, “la cuestión de denominación de origen es meramente comercial, la certificación aunque sea comercial es referente a la inocuidad, lo que los países donde se manda este producto quieren es que no haya problemas de enfermedades, que sea producto inocuo y que sea seguro”.
Confirmó que los productores de cítricos que tengan la certificación de origen serán quienes podrán tener un poco de más de ganancias por tener dicha documentación, mientras que los otros recibirán el costo que se merecen por no mostrar que su fruta se encuentra totalmente sana.
El pasado viernes, productores citrícolas recibieron cursos de capacitación en el combate a las plagas del limón, por lo que los 50 productores se fueron muy agradecidos de que el consejo de a conocer estos temas y con qué químicos combatirlos.