Las casas no son caras, pero diversos factores como la antigüedad, ubicación y remodelación elevan los precios de las mismas
José Miguel Bautista Hernández
Los precios de las viviendas varían según sus proporciones, pero hoy en día no resulta algo estratosférico construir una vivienda, sin embargo hay factores que la encarecen, mencionó Abraham Viveros Colmenares, asesor certificado de INFONAVIT.
En este concepto, el especialista aseguró que construir una vivienda sencilla pero cómoda y poco ostentosa puede oscilar entre los 100 y 150 mil pesos, sin embargo los precios que muchas veces se piden por ellas están viciados por los intermediarios, pero en casos de viviendas usadas hay gente que está buscando casas económicas y a precios razonables, lo que encarece esta situación es la ubicación, el tipo de construcción y las remodelaciones o los lujos que los vendedores hayan puesto en ellas.
También indicó que hay tres tipos de precios que se dan al público, el primero es aquel que se efectúa catastralmente en el palacio municipal que es un precio un poco bajo, existen los precios de avalúo comercial que pueden ser realizados por cualquier arquitecto certificado y el precio comercial, donde el vendedor pone la cifra a razón de la inversión realizada en ella y que con el tiempo estas mismas propiedades lejos de devaluarse adquieren más valor.
“En Martínez de la Torre, desafortunadamente las empresas grandes que se han venido como constructoras a hacer viviendas han hecho pasar mal sabor de boca a algunos derechohabientes que las han adquirido, pues triplican la inversión de sus costos vendiéndolas por arriba de los 300 mil pesos y siendo construcciones que muchas veces resultan con detalles”, agregó.
Indicó que en nuestro municipio existe una gran demanda en cuanto a vivienda se refiere, pues la mayoría de las empresas tienen por obligación que dar de alta a sus trabajadores ya sea ante el IMSS o el ISSTE, y que estas dos dependencias te dan la opción de una afore donde se pueden cotizar este tipo de créditos, ejemplificando que existen varias empresas en el municipio con más de 100 empleados cada una, sin contar a las grandes cadenas comerciales que tienen arriba de los 300 empleados en nómina.
En general, informó que la mayoría de los derechohabientes sabe lo que compra, sin embargo existen personas que perciben un salario mínimo o dos, pero a veces desconocen porqué son trabajadores de bajos perfiles, pero ellos les ayudan a adquirir algo que para ellos sea en beneficio, en cambio los que ganan tienen conocimiento acerca del tema o están bien asesorados con un arquitecto para que evalué sus posibles viviendas, concluyó.