Debido a la retención de 4 meses y medio de sus pagos
Llegará hasta las últimas consecuencias
Brenda Pérez Aguilar
Después de 40 años de servicio, el gobierno y el SNTE lo han privado de cuatro meses y medio de su salario, asegura el maestro Miguel Olmos Juárez, vocero del Movimiento Magisterial Popular Veracruzano y Enlace de los Movimientos Sociales de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, represalia que posiblemente se deba por haber participado y estar en contra de la reforma educativa, por lo que ayer al mediodía empezó una huelga de hambre, en el parque José María Mata de esta ciudad.
“Son varios los motivos que me orillaron a esto, el principal es que desde hace aproximadamente 4 meses y medio me están reteniendo el pago de mis quincenas, y el problema es que dos personas dependen de mí, un niño de un año y medio que no está recibiendo su pensión alimenticia, porque la SEV no abona los recursos al banco y porque a veces extiende los cheques sin fondos; también una señora que todos los días se tiene que estar dializando, debido a su problema de diabetes que ya está en una etapa crítica”, remarcó.
Reveló que en esto también deberían pensar las autoridades educativas, que no sólo lo están afectando a él, sino también a su familia, lo que podría generar una desgracia.
“Yo he podido cubrir todos los gastos, pero llega el momento en que los recursos se van acabando y los amigos se van cansando, les agradezco a mis compañeros maestros que en la quincena me apoyen un poquito para que pueda sobrevivir, pero con esto solo estamos cubriendo una falta de la autoridad educativa, porque a mi quien me tiene que pagar es la Secretaría de Educación de Veracruz y no mis compañeros maestros”, precisó el mentor.
Indicó que a pesar de dejar de recibir su sueldo estuvo cumpliendo con su labor hasta el día 14 de mayo, pero de acuerdo a lo que su abogado hasta dicho día le expresó, fue que lo que se le está haciendo, viene como represalia por haber participado en el movimiento magisterial contra la reforma educativa en 2013.
Aunado a esto, enfatizó que el gobierno siempre les pidió que se prepararan, lo que alrededor de 300 maestros lo hicieron, tomaron sus cursos, pasaron las pruebas y los promovieron, pero hasta este momento no les han pagado su carrera magisterial, lo que no es justo, porque se esforzaron por tomar sus cursos y ahora no les quieren cubrir su salario.
“Las autoridades educativas ya saben mi situación desde el mes de febrero, me prometieron que ya en abril me pagaban y es la fecha que no me han respondido con mis pagos, que digan cuándo van a pagar y yo me retiro, pero que sea algo formal, con firma y que me digan cuándo me van a pagar y todo lo que se me debe, porque luego puede suceder como a otros compañeros que les pagan una quincena y otra no”, expresó el afectado.
“Hay otros casos, donde por ejemplo la Secretaría esta descontando a los maestros una parte de su quincena, dinero que debería llegar de Fovissste, pero no lo está entregando, porque hay compañeros que hicieron contratos con casas comerciales y a través de nómina les iban a descontar y en este momento los bancos ya están exigiendo interés moratorio porque la SEV no está abonando, lo que quiere decir que no tiene recursos económicos y no nos vayan a salir al rato que se los llevó Edgar Espinoso, porque se dice que él es el responsable de que así estén las cosas y los maestros no tenemos la culpa”, advirtió.
La burla o “regalo” que le dieron el Día del Maestro, fue cuando se percató por medio del cajero automático, que le habían depositado 10 pesos con 80 centavos, lo cual fue lo que lo impulsó a manifestarse.
Por ello, hoy alza la voz para que las autoridades lo escuchen y le den una solución a su problema, y dialoguen que es lo único que pide, pero mientras se nieguen al diálogo seguirá en huelga de hambre en el parque José María Mata hasta llegar a las últimas consecuencias.
“Los compañeros de mi zona ya están pensando nuevamente en parar escuelas, porque hoy me están afectando a mí, pero mañana podrían ser ellos, y aquí lo único que podría pasar es que los compañeros vuelvan a estar en movimiento, lo que es algo seguro y que conste que nosotros queremos ir a trabajar pero es la autoridad la que provoca este tipo de situaciones”, concluyó.