Sólo duró unas horas la manifestación
Autoridades de la SEV escuchan inconformidad
Brenda Pérez Aguilar
Después de empezar una huelga de hambre y armar su campamento en donde se pensaba quedar por varios días, el vocero del Movimiento Magisterial Veracruzano y Coordinador de la Alianza de los Movimientos Sociales de la Coordinadora Social de los Trabajadores de la Educación, Miguel Olmos Juárez levantó su huelga de hambre, esto gracias a que por fin entabló un diálogo con representantes de la SEV vía telefónica y se comprometieron a pagarle sus 4 meses y medio de quincenas retenidas.
Explicó que cuando inició el diálogo durante el transcurso del jueves con los representantes de esta región, del Oficial Mayor de la SEV y del secretario de Gobierno le pedían que de inmediato levantara el campamento a lo que dijo que no, porque ya tiene la experiencia de este tipo de cosas y sabe perfectamente que muchas veces las promesas no se cumplen, por lo que pidió hablar directamente con las personas que le tendrían que resolver su problema y vía telefónica platicó con ellos y le pidieron que levantara su campamento y le resolverían su problema.
Pero el mentor pidió que se levantara una minuta, a lo que le dijeron que confiara en ellos y a las 9 p.m. mandaron a verificar si efectivamente había levantado su campamento y tomaron fotografías y en ese momento el pago correspondiente a este mes ya fue liberado, además, le liberaron las pensiones alimenticias y el resto de sus quincenas atrasadas se las irán depositando sucesivamente.
“No pude lograr más, hubiera querido que pagaran todo, pero me dijeron que tienen problemas de recursos financieros en la SEV, pero a nosotros como trabajadores no nos interesa, porque la responsable de pagar es la Secretaría de Educación de Veracruz. De antemano sabemos que los recursos se están empleando en las obras de infraestructura para los Juegos Centroamericanos que se realizarán en el estado”, mencionó.
Olmos Juárez recordó que desde febrero inició los trámites correspondientes, pero siempre le daban miles de excusas y pretextos para no pagarle y la verdad de todo, es que esto tenía un trasfondo político lo que siempre supo. No obstante, agradeció el apoyo de sus compañeros, maestros de escuela, de zona y de Villa Independencia, porque lo estuvieron sosteniendo económicamente y contaba con el apoyo de sus hijos, pero éste es un problema que le correspondía a la SEV y no hizo más que exigir uno de sus derechos como trabajador.