Enfermedades emocionales y mentales requieren de paciencia, comprensión y ayuda
José Miguel Bautista Hernández
“Una persona perturbada es capaz de los peores actos, en un momento de disturbio emocional podría llegar a destruirse a sí misma o destruir hasta su ser más querido”
En esta ocasión tuvimos la oportunidad de adentrarnos en la cotidianidad de un grupo de Neuróticos Anónimos, haciendo énfasis en que la finalidad de este reportaje no es evidenciar a ninguna de las personas que nos brindaron su confianza, sino dar a conocer un problema serio que existe en nuestra sociedad.
Para los fines de este trabajo, hemos tenido la necesidad de omitir nombres y algunos han sido alterados para preservar la integridad de los actores de esta problemática, pues se trata de personas a quienes la atención pública no les interesa, pues su labor como dijimos antes consiste en ayudar, y para ello resguardan su identidad mediante el anonimato.
“Según datos de la página www.saludymedicinas.com.mx, la Organización Mundial de la Salud (OMS) afirma que las enfermedades mentales son “uno de los principales problemas de salud pública a nivel mundial, pues una de cada 4 personas sufre algún grado de neurosis y ha llegado a padecer trastornos emocionales graves, al grado de requerir ayuda médica especializada”.
Tocando fondo
“Hola, mi nombre es ‘Miguel’ soy neurótico y estoy en recuperación, todos los testimonios que se escuchan desde la tribuna empiezan de este modo, pero lo realmente importante no es lo que cuentan, sino aquello que comunican con su experiencia a otros, sus vivencias son parte de sus vidas pero también de su recuperación”.
Como don ‘Álvaro’ que por su carácter fuerte y neurótico ha tenido 3 matrimonios fallidos, pero también explica con tristeza que en cada uno de ellos la violencia y el abuso han estado presentes, sin embargo, hoy por hoy vive tranquilo, feliz y rehaciendo su vida no solo sentimental sino personalmente al lado de una persona que ama y respeta, y lo que más agradece es la ayuda brindada en su grupo, pues lleva ya buen tiempo en Neuróticos Anónimos.
Asegura que ellos lo ayudaron a vencer sus miedos, cuenta este hombre de 43 años de carácter amable y semblante espigado, el porqué de su historia puede resultar algo comprensible pero no justificable, relata, ya que creció en un hogar disfuncional, como muchos que se generan en la actualidad, y es que desde que aún era un niño tuvo obligatoriamente que observar el alcoholismo de su padre, además de la violencia que éste ejercía sobre su madre.
Por supuesto, el odio y el resentimiento fueron a partir de ese momento en su vida sus inseparables compañeros, hasta hace dos años, tiempo en que se ha dedicado a sanar sus heridas y vivir con tranquilidad buscando siempre la serenidad ayudado por el poder superior de Dios, comprendiendo cada vez mejor a la gente que lo rodea, explica.
Otra de estas experiencias ha sido compartida por doña ‘Sara’, mujer de 54 años y que desde siempre se ha dedicado a las labores del hogar, ella por su parte llegó buscando refugio, pues los problemas familiares la agobiaban y apresuraban, ella terminó por alejar parcialmente a sus hijos de su lado, ya que los quería dominar completamente, así como sus acciones y sus personas.
Presa de orgullo, llegó a tener ataques de ansiedad, se convirtió en una persona criticona, envidiosa y chismosa, en este punto fue cuando se dio cuenta de la gravedad de su problema, pues los amigos también se fueron alejando, ya nadie quería estar con ella y esto la volvió seria y reservada, sabe de antemano que todo esto fue causa de la neurosis, pero también de una baja autoestima, ya que como ella misma se describe, en algún tiempo se mostró miedosa, negativa e insegura, aunque afirma que aún le falta mucho por aprender cada día da lo mejor para contrarrestar todo este daño que se hizo a sí misma.
Éste como muchos otros casos son situaciones en los que todos estos personajes han sido víctimas de su neurosis, pero también de todas aquellas emociones que la involucran, y es que según los testimonios del grupo, todo indica que no es necesario tocar fondo para poder pertenecer a él, ya que si se tienen problemas con las emociones, si ya le acarrea dificultades con los demás su mal carácter, sufre de ansiedad, ira, tristeza, depresión, miedo u otros defectos de carácter, lo mejor es decidirse y visitar alguno de estos centros de autoayuda.
Para darse una idea, los factores de los que se esta hablando como la depresión, estrés, ansiedad u otro tipo de problemas emocionales derivados de la neurosis, ésta causa por lo menos 14 ausencias en el trabajo al año y una reducción del 40% del desempeño laboral, pero lo alarmante es que en el 70% de los casos de enfermedades mentales los síntomas se desarrollan desde la adolescencia.
“Especialistas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) calculan que este problema afecta en México a aproximadamente 15 millones de personas”.
¿Cómo trabajan?
Como punto final de esta investigación, el programa de Neuróticos Anónimos sigue el mismo procedimiento del de Alcohólicos Anónimos y sus principios como los 12 pasos, sólo que éste se encuentra encauzado a solucionar los problemas emocionales, también se hace evidente que las reuniones van enfocadas a que los individuos en recuperación cuenten sus experiencias de manera voluntaria, así como la manera en que encontraron la recuperación ofreciéndoseles comprensión y simpatía desde su llegada.
Al igual que en Alcohólicos Anónimos, las reuniones de Neuróticos Anónimos se llevan a cabo con toda seriedad, respetando los protocolos del anonimato y siempre con el objetivo de sentirse mejor con uno mismo, pues aun cuando no se cuenta con una estadística exacta, existen distintos tipo de neurosis que afectan a gran parte de la población, la mayoría sin estar enterado de esto.
Al igual que todos los grupos de autoayuda, el anonimato es una parte vital de su labor, y es que esta asignatura es la base espiritual del programa de N.A., pues en él se recuerda que hay que dar más importancia a los principios que a la personalidad de cada uno.
¿Soy un neurótico?
Si usted quiere saber acerca de la sintomatología de esta enfermedad, solo debe hacerse estas preguntas, las cuales son solamente para usted y sin contarlas a nadie, reflexionará en si necesita o no la ayuda ofrecida.
¿Es usted suprasensible?, ¿Le gusta conmiserarse?, ¿Trata siempre de justificarse o defenderse?, ¿Padece de ansiedad en ciertos momentos?, ¿Es usted autoconsciente?, ¿Cree que todo el mundo lo observa?, ¿Es celoso o desconfiado?, ¿Le gusta criticar?, ¿Exagera pequeños problemas?, ¿Tiende a exagerar sus estados de optimismo y depresión?, ¿Sufre de disturbios sexuales?, ¿Vive disgustado con todo mundo?, ¿ Ha perdido sus ambiciones de superación?, ¿Pierde empleos?, ¿Tiende a ser ordenado en exceso?, ¿Es usted muy desordenado?, ¿Miente sin necesidad?, ¿Es usted supersticioso?, ¿Hace cosas que considera tontas?, ¿Padece alguna compulsión?, ¿Adolece de miedo a alguna cosa?, ¿Se enoja con facilidad?, ¿Tiene dificultad para concentrarse?, ¿Padece insomnio?, ¿Padece de dolores de cabeza?, ¿Se queda dormido con frecuencia?, ¿Se queda dormido cuando no debe?, ¿padece de enfermedades que el médico no logra descubrir?
Si ha contestado si a alguna o varias de estas preguntas, su neurosis puede presentar un serio problema, por lo que la forma más conveniente de evitarlo es buscar ayuda, y quizás lo esté ocultando con alguna de las llamadas “máscaras” de la enfermedad que demuestran defectos de carácter, mismas que se pueden traslucir en “ansiedad, ira, temor, preocupación, celos, resentimiento y/o conmiseración”, entre otras, pueden denotar o evidenciar la falta de ayuda, ya que lamentablemente en diversas ocasiones no se reconoce este tipo de problemas, hasta que se encuentra en una situación de verdadero riesgo.
