Quizá los Seoane solamente cambiaron a Carlos Leroux, colocando nuevos actores en el mismo teatro
Facundo Bartolo Salazar
Ante las versiones casi fantásticas sobre la reactivación del Ingenio Independencia, sobre todo porque causan solamente incertidumbre entre los productores de caña, surge la sospecha de que los dueños de la factoría sigan siendo los integrantes de la familia Seoane, encabezados por Carlos Seoane Castro, expresó José Abelardo Rosas Cuervo, quien fungió por más de 30 años como dirigente de los cañeros de la Confederación Nacional de Productores Rurales (CNPR).
Consideró la posibilidad de que los propietarios hayan cambiado solamente de administradores con la única finalidad de continuar creando confusión para ganar tiempo y mantener la “cortina de humo” que les permita continuar desmantelando la fábrica y llevar las piezas resultantes al ingenio La Gloria, que es “casualmente” propiedad de la familia Seoane. Indicó que a esa factoría fue llevada la fábrica de etanol, el torno macero, entre otros componentes estratégicos.
Asimismo, Rosas Cuervo comentó que si alguien tuviese 300 millones de pesos para invertir, no se molestarían en volver la mirada hacia el Ingenio Independencia, sino que crearían una nueva empresa altamente rentable, o de plano se retiraría a Hawaii o Cancún para vivir tan solo de los intereses de esa cantidad de dinero. Reiteró que ése es uno de los aspectos que restan credibilidad a los supuestos nuevos dueños del Ingenio Independencia, quienes por cierto, no se han acreditado debidamente, a través de una escritura pública o un acta constitutiva que los avale como tales.
Aseveró que por muchos años, los Seoane nunca dieron la cara, siendo los dueños de la factoría, pues enviaron como prestanombres a Carlos Leroux Camino, quien fungía como apoderado legal, pero con todas las facultades que tendría un propietario y a final de cuentas se ostentaba como tal, existiendo incertidumbre para la mayoría de las personas sobre ese asunto. Mencionó que la diferencia entre los actuales “propietarios” del Ingenio Independencia y Carlos Leroux Camino es que en su momento la personalidad de este último quedó plenamente definida mediante un documento notarial, lo cual no ha sucedido con los supuestos inversionistas.
Por todo lo anterior, el entrevistado señaló que quizá lo único que hicieron fue sacar a Carlos Leroux Camino del escenario y colocar nuevos actores en un teatro que sigue siendo el mismo, el Ingenio Independencia, mismo que carece de credibilidad para los productores de caña. Lo anterior, sabiendo que a 30 metros a la redonda, no hay espacios para sembrar caña, pues todas las tierras de cultivo están ocupadas por huertas de naranja y limón, las cuales definitivamente no serán derribadas para sembrar caña, embarcándose en una aventura en la que difícilmente se vislumbra un futuro.