16 de Noviembre de 2024
 

Esperan repunte en precio del limón entre julio y agosto

De momento, los productores hacen hasta lo imposible para recuperar por lo menos sus gastos de cosecha

Facundo Bartolo Salazar

Los precios del limón persa no tienen palabra de honor y en estos momentos están por los suelos, de tal manera que la caja de limón verde que hace unos meses se cotizaba en mil pesos ahora se vende en 35 pesos, mientras que la fruta de segunda está en 15 pesos la caja, situación que hace a los productores tener cierto optimismo acerca de un ligero repunte entre julio y agosto del presente año, pues de lo contrario se tornará catastrófica la economía de los citricultores, aseveró Leobardo Pérez Rendón en su carácter de productor.

Comentó que de nada sirve que ahora la producción de la fruta haya aumentado considerablemente, rindiendo entre 30 y 40 cajas de limón una hectárea, si realmente no se recuperan ni siquiera los gastos de cosecha, ni mucho menos se puede hablar de utilidades.

 

Aseveró que esa situación es más notoria entre los pequeños productores, quienes poseen entre tres y cinco hectáreas y en muchas ocasiones deben pagar fletes para salir a la subasta a comercializar su producto por no contar con vehículo propio, lo cual pulveriza sus posibilidades de obtener ganancias.

Asimismo, Pérez Rendón añadió que el hecho de contratar dos o tres personas que le ayuden a cosechar su fruta les implica más gastos a los productores, por lo que, más les valdría dejar los limones perder en las huertas, de no ser dañino para las mismas plantas.

Dijo que en tal caso, la fruta debe ser retirada, aun cuando no tenga precio en el mercado y tenga que ser desechada, pues puede dañar los suelos, resultando contraproducente un supuesto ahorro al dejarla en los árboles.

 

Reconoció que los bajos precios del limón se repiten cíclicamente, pues tras el posible repunte que se espera entre julio y agosto vendría un verdadero estancamiento en la cotización de la fruta, situación que no cambiará hasta fines del 2014 y principios del siguiente año en que nuevamente habrá precios atractivos que reactiven la economía de los productores.   


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