DE LA REDACCIÓN
La ausencia de autoridades que regulen el uso de las canchas deportivas de la colonia Ejidal y les den preferencias a ciertos personajes de esta colonia, ha puesto en jaque la armonía que debe existir en cuanto a convivencia deportiva.
La venta de cigarrillos e incluso el consumo de sustancias en esta cancha sigue siendo un problema latente, ya que los días lunes y martes son los más marcados y llenos de irregularidades que son consentidas por directivos de liga.
Como se recordará en días anteriores en la liga que juega los días lunes y martes se presentó una batalla campal entre jugadores, incentivado por la nula organización y desorden existente, además de que se da la venta de cigarros o probablemente otras sustancias durante estos días.
Castigar a justos por pecadores no debe ser una solución, pues diariamente decenas de niños y jóvenes se apropian de las canchas para realizar algún ejercicio y cuidar su salud, pues el espacio es un caso exitoso para atraer a los menores de edad y fomentar el deporte; sin embargo, urgen programas de vigilancia y prevención contra las adicciones o poner personas capacitadas al frente de los torneos e incluso al cuidado de dicha unidad.
En las instalaciones hay dos escenarios. El positivo: una mayoría de niños y jóvenes que hace deporte; el negativo, la falta de vigilancia para evitar que pequeños grupos de jóvenes consuman sustancias y pongan el mal ejemplo a los demás.
