-Dicen que el Día de las Madres será peor en ventas que el Día del Niño
-Muchos se quedaron con la mayoría de la mercancía de esta última fecha
Por Facundo Bartolo Salazar
El Día de las Madres será peor en ventas que el Día del Niño, pues es claro que muchos comerciantes se quedaron con la mayoría de la mercancía de esta última fecha, en parte por la difícil situación económica que prevalece entre la población, que no permite gastar más, y la proliferación sin control de los comerciantes foráneos, expuso Gerardo Zapata García, secretario de organización de la federación de comerciantes de la CROC.
Indicó que “uno de los problemas de siempre es la falta de dinero por causa de la caída de los cítricos y demás cuestiones que afectan los ingresos, pero también están los comerciantes de otras ciudades que se llevan buena parte de las ventas”. Apuntó que lo peor de todo es que tales comerciantes se regresan muy tranquilos a sus lugares de origen, después de llevarse el escaso circulante que los ciudadanos pueden destinar para sus celebraciones.
Zapata García mencionó que hace falta ejercer control sobre los foráneos, en lugar de alentarlos a que sigan llegando a esta ciudad, donde afectan a los comerciantes que si hacen sus vidas aquí, pagan sus impuestos y consumen productos y servicios que existen, mientras que los otros solo llegan de oportunidad. Lamentó también que las calles se encuentren saturadas por los ambulantes, pues desde hace años los comerciantes locales fueron exhortados a despejar las calles y para ello fue construida la Plaza Comercial San Juan, pero si los acuerdos no se respetan, daría lo mismo regresar a las calles.
Manifestó que no solamente comerciantes, sino taxistas ocupan los espacios que ya habían dejado libre los ambulantes de esta ciudad, lo cual consideró, es un retroceso para la vialidad y la imagen de Martínez de la Torre. Es por ello que consideró de vital importancia que las autoridades y líderes del comercio se pongan de acuerdo para emprender las acciones pertinentes, pues al parecer se les da preferencia a los foráneos, en perjuicio de los comerciantes locales.