-Por su condición se negaron a venderle medicamento en farmacias similares
Por Brenda Pérez Aguilar
La ineficiencia y falta de conocimientos de los empleados de mostrador de las farmacias similares, quienes discriminaron a una persona discapacitada.
Ángel Bernal Chávez, vecino de Villa Independencia, explicó que debido que necesitaba unas pastillas de penicilina para su mamá, se dirigió a la farmacia de productos similares que se encuentra sobre la calle Allende a escasos metros del mercado municipal, sin embargo la empleada, quien estaba distraída en una amena plática con otra persona se negó a venderle el medicamento pese a que el cliente llevaba su receta.
“Creo que es una falta de respeto y sensibilidad de esta persona, debido a que en ningún momento dejó de platicar con la otra señorita para ponerme atención y en segunda, posiblemente pensó que lo quería regalado ya que me vio con muletas, las cuales necesito para poder caminar, sin embargo yo iba a comprar el medicamento, no a pedir limosna”, dijo.
Agregó, que después de este mal momento, se dirigió a otra farmacia en donde no tuvo ningún problema para que le vendieran el medicamento, pues la encargada le comentó que es un medicamento controlado por lo que al reverso de la copia de la receta le hizo una anotación para que cuando regrese por la segunda dosis no tenga ningún problema.
Por último, lamentó la falta de sensibilidad de algunas personas por ejemplo la empleada de mostrador de la primera farmacia, así como su falta de conocimientos, por lo que pidió a los encargados de la misma poner personas para que puedan atender a los clientes con eficiencia ya que para eso las contratan, puesto que desafortunadamente tuvo que acudir a una segunda farmacia bajo los intensos rayos del sol batallando apoyado con sus muletas, debido a que es discapacitado.
