1 de Febrero de 2025
 

Tratados comerciales no benefician a productores

-Los más beneficiados son los empacadores, quienes pueden exportar limón quizá con más ventajas

Por Facundo Bartolo Salazar

Los tratados comerciales con otros países no benefician a los productores, llámense como se llamen, y sin importar quienes los hagan, pues los más beneficiados son los empacadores, quienes pueden exportar limón quizá con más ventajas, pero dejando a los pequeños citricultores con las mismas migajas que deja ese negocio, expresó Gaudencio Méndez Ramírez, en su carácter de pequeño productor.

Recordó que “desde hace muchos años se habló de que aquel Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos y Canadá iba a ser una maravilla y prácticamente México sería tan rico como esos países, pero solamente fue un engaño del gobierno, de los que siempre le venden al pueblo pobre e ignorante”. Apuntó que aquel tratado no benefició para nada a los pequeños productores, sencillamente porque los países ricos valoran a sus campesinos, los protegen y les dan subsidios que les permiten producir en grandes cantidades y con una calidad que puede competir con otros países sin problema alguno.

Méndez Ramírez lamentó que en México los campesinos solo escuchan hablar de apoyos fantasmas, que nunca pueden ver, o que nunca existen para ellos, sino para los grandes empresarios que si cuentan con contadores o ingenieros que les cuadran cualquier proyecto ante las dependencias del sector agropecuario. Dijo que de esa manera se ha manejado todo, brindando a los ricos todas las facilidades, en tanto que los productores desposeídos generalmente se quedan al margen de esas entregas de recursos.

Consideró que con el nuevo tratado que implementará el nuevo gobierno la situación no será diferente, y lo que sucederá solamente tendrá que ver con los ajustes que los empacadores y demás empresarios harán para seguir ganando más sin ser afectados. Añadió que de ninguna manera eso significa que pagarán la fruta a mejor precio, sino que seguirán inventando más pretextos para pagar lo que quieran, sin que haya mejora alguna.


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