Los propios alumnos aportan y administran sus recursos para realizar esos eventos
Facundo Bartolo Salazar
El Bachillerato de la Universidad Popular Autónoma de Veracruz(UPAV) no tiene problemas con cuotas de graduaciones, pues no interviene en su realización, aun cuando la institución apoya a los alumnos con la coordinación y la logística en periodos normales en que se llevan a cabo clausuras, eventos en que los alumnos se encargan de las acciones y gestiones necesarias, expuso Luis Del Ángel Sánchez Torres, director solidario de la institución.
Indicó que la situación se maneja de esa manera, en virtud de que la UPAV no recibe recursos del gobierno para los fines antes citados, por lo que la realización de esos eventos se debe basar en las aportaciones que realizan y administran los propios alumnos. Informó que el próximo 26 del presente mes se gradúa un grupo de sexto semestre, mismo que está organizando su evento, mientras que los profesores y él mismo como director tan solo se limitan a recomendarles como pedir apoyos a los ayuntamientos o conseguir padrinos de generación.
Naturalmente, lo anterior evita que se imponga a los alumnos el lugar donde se llevará a cabo la ceremonia, dar cuotas o cualquier otra acción que dé lugar a señalamientos. En ese ámbito, dijo que la UPAV tiene un sistema estupendo, que tiene muchas facilidades, pero en aras de prevenir señalamientos de cualquier tipo, sobre supuestos malos usos y manejos, se procura el menor contacto con la organización de los citados eventos.
Sánchez Torres informó lo anterior el pasado sábado en que se llevó a cabo la entrega de 105 certificados del Bachillerato UPAV de las generaciones desde al 2010 al 2014. Al respecto, reveló que la institución tiene generaciones nuevas cada tres meses y que, de hecho, se habían presentado algunos problemas administrativos con la tramitación de certificados, mismos que se están tratando de solucionar.
Estableció que el periodo regular de entrega de tales documentos es de dos a tres meses, registrándose tardanza por problemas de documentos incompletos, o bien, por fotografías no entregadas. Comentó también que en ocasiones, al salir los estudiantes, se desaparecen y dejan sus trámites inconclusos, no obstante, descartó que las dificultades se presenten por adeudos de materias, pues cualquier inconveniente de ese tipo se debe finiquitar.
Insistió en que a veces los estudiantes se gradúan y se desentienden de la escuela o los trámites, siendo muy difícil contactarlos. Aseveró que otra posibilidad es que los muchachos descuidan sus trámites por desidia y en el momento que les urge argumentan que nunca les entregaron sus documentos. Afirmó que si es posible salvar problemas de certificados en el momento en que los alumnos entren a la universidad, pues su compromiso desde su llegada en julio de 2013 es tratar de entregar todos los certificados, aun cuando sean de periodos anteriores a los suyos.