-Esa acción debería ser castigada por las leyes, no obstante, esa situación es permitida
Por Facundo Bartolo Salazar
Es un delito cobrar inscripciones en escuelas, y esa acción debería ser castigada por las leyes, no obstante, esa situación es permitida por la mala costumbre de la mayoría de los directores, en contubernio con integrantes de las sociedades de padres de familia, llámense presidentes o tesoreros, expuso Mauro Alvarado Loranca, en su carácter de padre de familia y abogado.
Sostuvo que “estoy de acuerdo en cooperar como padre de familia, como deberían hacerlo todos los padres, para el sostenimiento y el mantenimiento de las escuelas, pero eso es muy diferente a pagar cuotas que no se ocupen o desaparezcan, porque ya se las llevó el tesorero”. Mencionó que en muchos casos no se procede legalmente contra las personas que incurren en esas acciones, de tal forma que esos recursos se pierden. Dijo que también hay casos en que se maquillan algunas obras en las escuelas, pero en la realidad los inmuebles siguen igual.
Alvarado Loranca aseveró que hay muchos padres de escasos recursos, quienes en lugar de pagar inscripciones deberían aplicar ese dinero para comprar zapatos a sus hijos, sus libros y demás, sin ser negocio de unas cuantas personas. Apuntó que hay un reglamento a nivel estatal y nacional para las sociedades de padres de familia, en el que se señala que a los 15 días de iniciadas las clases en las escuelas, se debe hacer un llamado para la renovación de dichas sociedades.
Expresó que dichas asociaciones elaborarán sus estatutos, estando relacionadas con las autoridades educativas, y a la vez deberán hacer un proyecto de alguna obra que se vaya a llevar a cabo durante el ciclo escolar. Añadió que sobre el presupuesto que se requiera para esos trabajos si será posible acordar una cooperación, pero nunca se debe aportar dinero adelantado, sin saber en qué se va a aplicar. Manifestó que lo peor de todo es que de esas cuotas de inscripción una parte va a parar a las supervisiones escolares, lo cual hace pensar en corrupción, misma que afecta a los padres de familia, especialmente a los de menos recursos.
Especificó que en México está regulado que la educación debe ser gratuita y laica, tal como lo ha refrendado el primer mandatario, que no debe haber discusiones a ese respecto, y no se cobrarán inscripciones en los planteles educativos. Sin embargo, esas cuotas se siguen cobrando en la realidad, pero en ese contexto se debe destacar que los padres de familia están siempre dispuestos a cooperar con el sostenimiento y mantenimiento de las escuelas, sin que eso implique que estén obligados a pagar inscripciones supuestamente por voluntad.
