24 de Enero de 2025
 

El problema del Bobos no es la contaminación, sino la indiferencia

-Eso implica pérdida de tiempo que hace más lejano el rescate de ese cuerpo de agua

Por Facundo Bartolo Salazar

El problema del Río Bobos no es la contaminación, sino la indiferencia que cada vez más muestran las autoridades de los diferentes niveles, lo cual implica pérdida de tiempo que hace más lejano el rescate de ese cuerpo de agua que está muriendo, sin que se abran posibilidades de llevar a cabo acciones concretas que valgan la pena, señaló Rubén Cortés Cortés, presidente de la asociación civil Pescadores Protectores del Medio Ambiente.

Reveló que “nos hemos cansado de ir y venir de las dependencias y nadie realmente ha tomado decisiones definitivas para salvar el río que en su momento nos dio sustento y una forma de vida, aunque eso ahora sea solo un recuerdo que se empaña con el ecocidio que acecha al Bobos”. Dijo recordar los tiempos en que los regidores de Martínez de la Torre daban la cara por ese problema tan grave, y apoyaban en lo que estaba a su alcance, e incluso participaban en las reuniones con representantes de la Conagua, Semarnat y Profepa, además de representantes de empresas contaminantes.

El entrevistado expresó que desgraciadamente, el panorama actual es muy diferente, y no hay opciones siquiera de establecer una coordinación con autoridades para hacer frente a la contaminación, sobre todo buscando sanciones para quienes resulten responsables de las mortandades de peces y otras especies valiosas para el medio ambiente. Mencionó que cada vez resulta más difícil reaccionar con fuerza con las empresas contaminantes, pues no hay autoridad que respalde los movimientos que se lleven a cabo al respecto.

Pero aunque el futuro no muestre nada halagador, Rubén Cortés, comentó que al menos los pescadores tienen toda la voluntad para seguir haciendo un esfuerzo y sin perder las esperanzas, acudir ante las dependencias ambientales para que cumplan con su deber con el río Bobos y demás cuerpos de agua de la región.


Lo último en el Heraldo