Por Brenda Pérez Aguilar
La inundación del 99 fue una de las emergencias más grandes que se han presentado en la historia de Veracruz, principalmente en la zona norte del Estado, recuerda el ex coordinador regional de Protección Civil de esta región, Antonio Rosas Delón.
La fuerte inundación de hace 20 años, desde Martínez de la Torre hasta Tampico, explicó, fue provocada por la depresión tropical número 11, (el 4 de octubre de 1999), cuando el licenciado Pedro Manterola Sainz (QEPD) era presidente municipal y él era director municipal de Protección Civil.
La inundación de 1999 hizo un parteaguas en la Zona Norte del Estado de Veracruz, ya que la gente empezó a tomar una mayor conciencia en cuanto a las contingencias, puesto que estaban muy acostumbrados a que las emergencias eran de carácter recurrente.
Y es que dijo, 40 años después del huracán Yaneth en 1955, en 1995 hubo una inundación que afectó principalmente a la zona de Misantla y toda la gente decía que iban a pasar otros 40 años, debido a la recurrencia para que sucediera otra catástrofe de esta magnitud, sin embargo solo pasaron 4 años, por lo que en el 99 entró esta emergencia y duró cuatro días de lluvia intensa, desde la zona de toda la Sierra de Teziutlán, Puebla, lo que ocasionó que hubiera tantas pérdidas humanas y materiales en ese entonces.
Asimismo, Rosas Delón destacó, que tras las inundaciones, los últimos temblores registrados en la Ciudad de México y la sequía, toda la población ya tuvo que haber adquirido la conciencia de la cultura de Protección Civil, principalmente en el estado de Veracruz.
En este sentido, señaló que por el cambio climático y las condiciones que se están dando actualmente por el deterioro que le han hecho a la naturaleza, la gente ya debe estar preparada, debido a que están generando emergencias de mayor magnitud, por lo que son más vulnerables y la población debe de adoptar las medidas de prevención.
“La inundación del 99 es una huella que ha dejado una marca en el estado de Veracruz, pues hasta el momento se considera como la catástrofe más grande que ha tenido la zona norte del Estado, por lo que la preparación, la educación y la prevención que tenga la gente ante este tipo de fenómenos, será la magnitud de las afectaciones que llegarán a tener”, concluyó.