-En el transporte público
Por Brenda Pérez Aguilar
A pesar de que en los primeros asientos de las unidades del servicio de transporte público urbano, hay un letrero que indica que esos espacios son preferentemente para las personas con discapacidad, mujeres embarazadas y personas de la tercera edad, usuarios hacen caso omiso, por lo que al subir a las unidades, rápidamente ocupan dichos lugares.
“Soy madre de una niña con discapacidad y la verdad, es que da mucha tristeza ver que cuando nosotros subimos a la unidad, estos espacios ya van ocupados por los usuarios en general y nos tenemos que esperar a que los desocupen”, comentó un ama de casa.
Explicó que los primeros dos asientos son para las personas con discapacidad, debido a que son áreas amplias para que quepa perfectamente una silla de ruedas y a la hora de abordar la unidad rápidamente puedan acomodarse sin ningún problema.
La entrevistada expuso, que es necesaria una mayor cultura en la población para que respete las áreas que no les corresponde como por ejemplo también en el caso de las rampas que se encuentran en los espacios públicos como parques, mercados e iglesias, ya que no es un gusto ascender o descender por la rampa, sino una necesidad, pues para muchas personas poder mover a un familiar en una silla de ruedas, a veces les resulta un tanto complicado.
“Invitó a la población en general para que solo un día se ponga en nuestros zapatos y vean lo complicado que es usar desde unas muletas, un bastón y hasta una silla de ruedas, por lo que exhortamos para que respeten los espacios en los microbuses, así como las rampas en los espacios públicos”, concluyó.