-La permisibilidad excesiva y la nula atención, son factores de malas conductas, asegura psicología del IMM
Por Miguel Bautista
Tras ser aprobado esta semana por el senado de la República una reforma a la ley general de los derechos de niñas, niños y adolescentes para prohibir ciertos métodos de crianza como jalones de oreja, pellizcos o cachetadas por parte de padres, familiares a los niños, especialistas en materia señalan que aunque son normativos, este tipo de legislaciones podrían estar mal encauzadas.
Al respecto la Psicóloga del Instituto Municipal de las Mujeres, Karla Alejandra González Peña, opinó que los maltratos físicos si dañan a los menores, pero hay otros tipos de acciones por parte de los padres que marcan más su crecimiento, caso particular es la falta de límites, permisibilidad excesiva y nula atención por parte de los familiares.
Explicó que no solo los maltratos físicos son perjudiciales para los infantes, pues si no cuentan con la atención de sus padres, o vivir en un contexto desfavorable para su sano desarrollo también podría traer consecuencias.
Dijo que en la actualidad lamentablemente los infantes viven una falta de autoridad por parte de sus cuidadores, lo que genera niños “malcriados”, caprichosos, e incluso en caso de ser necesario en algunas ocasiones si se deben de aplicar ciertos correctivos, para que los infantes conozcan límites, figuras de autoridad y siempre y cuando estos no sean muy severos.
Explicó que también es necesario que los padres dediquen por lo menos media hora de calidad a sus hijos, donde se demuestre el cariño que se le tiene a estos, se les inculque respeto, valores y la atención se centre solo en ellos, gracias a esto, los niños podrán comprender que a pesar de que sus padres trabajan siempre cuentan con ellos.
Indicó que parte del problema es que los padres siempre delegan la educación de sus hijos a los maestros o psicólogos, y por situaciones como estas, es que va en aumento el número de niños con hiperactividad, algún tipo de déficit de atención y conductas antisociales.
Agregó que de haberse aprobado esta ley, también se tendría que crear a la par un instituto que vigile y sancione a quienes apliquen castigos a los infantes.