Con 75 personas inscritas arrancaron los cursos de repostería, corte y confección, manualidades, tejido y bordado, y pintura en tela
Mi Casa de Talleres DIF es una iniciativa de la señora Gabriela Álvarez Martínez a través del Sistema Municipal para el Desarrollo Integral de la Familia (SMDIF), que inauguró sus instalaciones el pasado martes 30 de junio, donde se imparten cursos de repostería, corte y confección, manualidades, tejido y bordado, y pintura en tela.
Para su arranque, 75 mujeres misantecas se inscribieron en los diferentes cursos que se darán en esta casa que se ubica en la calle Alfonso Arroyo Flores, esquina con Jaime Nunó, de la zona centro de Misantla (a unos pasos de lo que fue el Club de Leones).
Durante el corte de listón, la señora Gabriela Álvarez Martínez narró cómo nació la idea de abrir Mi Casa de Talleres DIF, un sitio donde la persona que decide aprender algún oficio o actividad no paga.
“Mi Casa de Talleres DIF es una inquietud que traía desde que mi esposo (Efrén Meza Ruiz) asumió la presidencia municipal y me pidió que lo acompañara en el trabajo asistencial, paralelamente al trabajo que realiza desde el Honorable Ayuntamiento”, dijo.
Y es que al llegar como presidenta del DIF Municipal se dio cuenta que hubo quienes se olvidaron de los principios de esta dependencia, que tiene como objetivo generar condiciones para que las familias alcancen un desarrollo integral, donde haya bienestar y armonía.
“Los cursos se hicieron porque las personas que están al frente de ellos, se acercaron a nosotros, demostrando sus capacidades en los diferentes oficios, lanzamos una convocatoria para colonias y hace unos días egresaron 25 personas, de las cuales nos sentimos orgullosos, porque recibieron una capacitación para el autoempleo. De ahí quisimos que las personas de la cabecera disfrutaran de los cursos”, indicó.
Pero, ¿qué se necesita para ser parte de Mi Casa de Talleres DIF?, muchas ganas de salir adelante, recibiendo herramientas de trabajo por medio de un curso, estar dispuesto a comprar ya sea en equipo o individual los materiales que utilizarás y tener disposición de horario, para faltar lo menos posible, pues capacitarte no genera un costo.
Como está escrito en la Biblia, “que no sepa tu mano izquierda lo que hace tu derecha”, es una constante en las oficinas que atiende la entrevistada, dado que el trabajo asistencial, encierra un sinfín de acciones que se hacen de manera discreta, con la única intención de ayudar a quien lo necesita.