El comercio informal ha vuelto a las calles
Jorge Parra
Un caos vial y una ferviente anarquía es la que se vive a diario en las más céntricas calles de la ciudad de Misantla, esto debido al comercio ambulante desordenado que se practica día a día en ese lugar y a que no ha habido autoridad alguna que pueda con el desorden.
Aún está en la memoria de los misantecos la forma en que hace unos meses las autoridades municipales se determinaron por acabar con el ambulantaje, y limpiaron las calles de los comerciantes informales que aunque buscaban la vida en dicho lugar, agravian a toda una ciudad al entorpecer la vialidad y los espacios públicos.
Algunos de ellos buscaron locales para vender sus mercancías y han dejado las calles, pero otros no, se aferraron más aún a estar en las calles y lo que inició como un permiso temporal en la época decembrina pasada se ha convertido hoy día en una verdadera anarquía.
Tal como si se tratara del viejo oeste, las calles de Misantla alrededor del mercado municipal no tienen orden, pues además hay vehículos estacionados en segunda fila casi agotando el carril de circulación y reduciéndolo hasta casi cortarse el flujo vehicular.
Caras fueron las facturas y escarnio social que pagará el gobierno municipal por acudir con apoyo de la policía a intentar retirar a los comercios, y de igual forma los ultrajes a la autoridad que se llevaron a cabo en varias ocasiones.
Otro de los lugares tomados por el ambulantaje es la calle Comonfort, la cual al ser de un solo sentido vehicular prácticamente media calle ha sido tomada por los comerciantes, camionetas estacionadas donde en las noches se guardan las mercancías y de las cuales cada mañana solo es extraída la mercancía para ser exhibida, y vendida, han hecho que dicha calle sea un lugar donde día y noche hay vehículos.
El desorden urbano en el pleno centro de Misantla ha tomado de nueva cuenta por asalto a la ciudad, lo que deja ver que en breve y con el paso del tiempo la situación llegara a ser igual o peor que la que prevalecía anteriormente.
