Aline García Díaz
Para los vendedores y productores de las carnes rojas del municipio, esta temporada de Cuaresma no les afectará en sus ventas, ya que aseguraron la tradición se ha perdido.
Arturo de la Luz, propietario de una carnicería del centro de la ciudad, dijo que no temen a que bajen las ventas en esta temporada, esto debido a se ha perdido la tradición de años anteriores en donde la población evitaba comer cualquier tipo de carnes rojas, en especial los viernes, según la creencia religiosa católica, por lo que aseguró no ser afectado con esta temporada de Cuaresma.
“En mi negocio yo lo atribuyo a dos factores, una a que mantengo los precios bajos para la población, y dos a que la tradición se está perdiendo, antes la gente evitaba comer carne de cerdo o res, ahora ya no guardan vigilia, además lo importante es no comerse a la gente, levantando falsos, criticando, eso es lo que pide la iglesia católica”, explicó.
El propietario dio a conocer que tienen más de 40 años dedicándose a la venta de carnes, en especial la de pollo y puerco, y que un factor que lo mantiene dentro del gusto de la gente es que conserva sus precios bajos.
Puntualizó que la temporada alta para ellos es en Todos Santos y las fiestas decembrinas, pero en esta Cuaresma no han disminuido sus ventas.
La Semana Santa es la conmemoración anual cristiana de la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesús de Nazaret, por eso, es un período de intensa actividad litúrgica dentro de las diversas confesiones cristianas, da comienzo con el domingo de ramos y finaliza con el domingo de resurrección.