* Periodo vacacional ha permitido pequeño repunte en ventas
Jorge Parra
El comercio es así, a veces se vende mucho y a veces se vende poco, dice don Alberto Javier Pérez, delegado Regional de Mercados del Estado de Veracruz; comerciante desde hace ya muchos años, don Beto, como todos lo conocen, hace un espacio y nos comenta que durante este periodo vacacional las ventas han incrementado un poco; sin embargo para muchos de los locatarios del mercado el verdadero rejuego económico llegará con el regreso a clases.
Don Beto nos cuenta que durante este periodo las ventas han subido un poco gracias a la afluencia de vacacionistas “las ventas han repuntado pero porque tenemos visitantes hay quien viene de otros lados y a eso se debe que haya un poco de movimiento en el mercado, pero normalmente está más tranquilo”.
Aseguró que aunque a veces hay poco movimiento en el mercado municipal Antonio M. Quirasco, “si lo comparamos con el mercado pues sí nos ha ido mejor, no teníamos ventas ni clientela, se podría decir que estábamos abandonados por las autoridades de ese momento y por nuestros mismos clientes que les tocaba lejos ir a buscarnos hasta allá”.
Pero don Beto igual que sus compañeros tienen la esperanza de que con la llegada de la feria y el regreso a clases durante este mes de agosto, las cosas mejoren, “esperamos que a la feria venga gente de fuera y haya derrama económica, y con eso se eleven las ventas; hoy estamos empezando ya agosto y ya se supone que debe haber un poco más de rejuego”.
Abundó: “Para los compañeros que se dedican a vender artículos de escuela, calzado, ropa, ahorita se preparan con mochilas con uniformes, calzado, todo lo que compran los padres de familia y para ellos ya hay un poco más de rejuego económico”.
En materia de la venta de alimentos cárnicos, área en la que se desempeña don Beto, la cosas han mejorado nos dice, pues asegura que en el nuevo mercado la gente ha empezado a reconocer el área de carnicerías y ya se acerca a comprar.
“Hoy me he dado cuenta que estoy mejor aquí, en comparación con el otro lugar donde estuve antes, anteriormente estaba yo ubicado en el local 113, pero ya al pasarme a mi local que me fue asignado, pues la ventas han mejorado un poco”.
Aunque los precios de productos como el pollo no tienen precios fijos y llegó a estar en días pasados en 50 pesos el kilo como precio al cliente, hoy este producto ha bajado, y gente como don Beto debe adaptar los precios de su producto “si sube el precio lo subimos nosotros también y si baja, pues nuevamente lo bajamos, pero el precio del pollo siempre cambia, dependiendo de la producción del producto”.
Con la feria y el regreso a clases en puerta los comerciantes comienzan a contar los días para que llegue a su fin la época de la “guayaba” tiempo que es conocido por la escasez de circulante y que para ellos se traduce en bajas ventas.
