Preparan ‘lluvia’ de amparos contra reformas al CCT
Forman en Poza Rica frente para defensa de petroleros jubilados
Édgar Escamilla
Poza Rica
Derivado de la Reforma Energética y la migración de Petróleos Mexicanos (Pemex) de empresa paraestatal a productiva del Estado, así como de la revisión del Contrato Colectivo de Trabajo, el pago de las pensiones de los jubilados petroleros pasarían a manos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHyCP), mientras que sus viudas recibirían el pago de pensiones únicamente por tres años a partir del fallecimiento del trabajador, lo mismo que el servicio médico, que sería provisto por el Instituto de Servicios de Seguridad Social de los Trabajadores del Estado (ISSSTE).
El gobierno federal a través del decreto del once de agosto de 2014, dispuso que Pemex y el sindicato petrolero realizaran negociaciones para modificar el sistema de pensiones bajo el que se rige la empresa, a fin de reducir su pasivo laboral, mismo que abarca tanto las jubilatorias de los petroleros como las post mortem de sus viudas.
Con esta reforma, se prevé que la Secretaría de Hacienda tenga a su cargo a los trabajadores petroleros jubilados para pagarles directamente sus pensiones, mientras que el servicio médico que ofrece Pemex lo absorbería el ISSSTE.
“Ya sabemos que el ISSSTE es insuficiente para atender a su derechohabiencia y si somos 100 mil jubilados, algunos con sus esposas, se van a incrementar los problemas al interior del instituto, lo que nos preocupa en sobremanera por ser de vital importancia para nosotros los jubilados, que rondamos entre los 65 y 70 años de edad”, señaló en entrevista Francisco Sánchez Peña, presidente del Frente pro defensa de jubilados petroleros de México A.C.
Sánchez Peña estuvo acompañado además por Francisco Cruz, secretario también del Frente, durante una reunión informativa a la que asistieron trabajadores petroleros jubilados de Poza Rica y tras la cual se definió crear una delegación en este municipio, dada la cantidad de jubilados existentes en la región, sumándose a las delegaciones de Reynosa, Tamaulipas; Salamanca, Guanajuato; Paraíso, Tabasco; así como Veracruz y Coatzacoalcos en esta entidad.
Una de las principales preocupaciones de los jubilados es el futuro que les depara a sus viudas, quienes dejarían de percibir una pensión vitalicia como hasta la fecha, y el pago lo recibirían únicamente durante los tres años siguientes al fallecimiento del trabajador, generando con ello un problema social y económico, sobre todo en ciudades petroleras como Poza Rica, donde gran parte de la población depende directa o indirectamente de Pemex.
A través de este Frente de defensa buscarán interponer los amparos respectivos en cuanto se publique oficialmente la modificación del sistema de pensiones de Pemex, que se espera sea a partir de esta fecha y hasta antes del once de noviembre.
Estarán recurriendo a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), así como a algunos senadores y diputados que “han dado muestra de simpatía al movimiento para poder interponer alguna controversia constitucional”.
Refirieron que el aumento autorizado para este año y publicado a través de un boletín de prensa de Pemex, que habla de un 3.99 por ciento directo al salario y 1.75 por ciento en prestaciones, forma parte de las negociaciones que se realizan cada año, pero lo verdaderamente trascendental son el resto de la revisión del contrato que está establecido se realice cada dos años.
Adicionalmente se pretende eliminar los subsidios en gasolina, gas y canasta básica, lo que mermará aún más las pensiones jubilatorias.
Enfatizaron que Pemex y el gobierno federal están disponiendo que existan dos grupos de jubilados a partir de la reforma; el primero, los que ya estaban jubilados y que pasarán a un régimen de pensiones al amparo de la SHyCP y el otro grupo de los futuros jubilados, que empezarán a cotizar en el sistema de ahorro para el retiro, que se integrarán a los fondos de las Afores, y con ello la empresa se quedaría sin pasivo laboral.