Por Facundo Bartolo Salazar
Comerciantes ambulantes no cumplen las disposiciones de las autoridades municipales ni de salud y continúan exponiéndose ellos mismos, así como a sus clientes, a contagios, ya en plena fase 3 de la pandemia por coronavirus.
Pese a haber sido notificados de manera oportuna, aún se pueden observar vendedores de fruta, principalmente en los alrededores del Mercado Municipal, obviamente tratando de sobrevivir y llevar el sustento diario a sus familias, pero sin las medidas necesarias que ha recomendado el Sector Salud para prevenir el contagio del coronavirus. De hecho, no se observa que usen cubrebocas, ni mucho menos se registra la aplicación de gel antibacterial, ni para ellos, ni mucho menos para sus clientes.
Se tiene la confianza de que las autoridades correspondientes actúen ante ese hecho, pues es indispensable para la mayoría de la población acatar las disposiciones para evitar que se disparen los casos de coronavirus e incluso se presenten fallecimientos, por no aplicar las medidas pertinentes.
Es bien conocida la necedad de los ambulantes, especialmente los foráneos, pues generalmente se niegan a cumplir con los ordenamientos, siendo evidente que necesitan trabajar, pero ajustándose a las disposiciones de las autoridades, sin infringir leyes y reglamentos. Ahora ante la contingencia sanitaria se espera que esos vendedores tomen conciencia y se retiren al menos de las calles principales de la ciudad. Lo anterior, al tomar en cuenta que otros ambulantes han decidido retirarse más allá de la Avenida 5 de Febrero, o incluso a la altura de la colonia San Manuel de esta ciudad.
