-Independientemente de las restricciones que marcan las autoridades ante el riesgo de contagio del coronavirus
Por Facundo Bartolo Salazar
Regresan los comerciantes a las calles en diferentes puntos de la ciudad, independientemente de las restricciones que marcan las autoridades ante el riesgo de contagio del coronavirus, lo cual deja mucho que desear, aunado al hecho de que otras grandes empresas también vuelven a abrir, o bien, tienen problemas para cuidar que los clientes conserven su distancia y cumplan las demás medidas.
Definitivamente, son reales las carencias que se presentan ya en los hogares de los diferentes sectores poblacionales, de manera que los afectados en su mayoría se ven obligados a obtener ingresos de cualquier manera, con la finalidad de hacer frente a los gastos diarios. En general, eso se ve reflejado en los vendedores ambulantes, quienes ya sin importar que sean locales o foráneos, se resisten a dejar las calles como fuente de sus ingresos, aun cuando las autoridades les han recomendado que hagan lo posible por conservar la salud de sus clientes, su familia, y la de ellos mismos. Lo anterior, al tomar en cuenta que el coronavirus puede llegar a complicarse y ser mortal, sobre todo en personas vulnerables.
Desafortunadamente, las carencias económicas a causa de la pandemia comienzan a reflejarse en los diferentes sectores de la población, de manera que no solamente sus ambulantes, sino que también grandes empresas como Yoko comienzan a abrir nuevamente sus locales, pues la cuestión es seguir generando actividad económica, además de conservar los empleos que son tan necesarios, a través de establecimientos de ese tipo.
En ese contexto, también destaca la polémica acerca de grandes consorcios como Elektra, o Coppel, las cuales se han mantenido abiertas, a pesar de que sus actividades no son esenciales. Cabe hacer mención de que en algunos casos, se habla de riesgos entre los clientes, pues no son exhortados a guardar su distancia.