11 de Mayo de 2024
 

Despiden a miembros de familia fallecida en derrumbe

 

* Han pasado 48 horas de la tragedia que puso de luto a Xalapa, la que cobró la vida de casi una familia completa, en la que murieron la madre y los 5 hijos, y quedó con vida el padre de familia, Adán Moreno

 

AVC Noticias

Xalapa, Ver.- En medio de llanto y dolor, vecinos y familiares brindaron un fuerte aplauso cuando los ataúdes con los cuerpos adentro de Dora Isabel y sus cinco hijos: Kevin, Cristofer, Axel Jair, Alexa y María Fernanda, eran sacados de la casa para ponerlos adentro de las carrozas fúnebres.

El recolector y vendedor de fierros viejos Adán Moreno Ortiz trata de sacar fuerzas para dar el último adiós a los seis integrantes de su familia; a Dora Isabel, la mujer que se embarazó cinco veces para hacerlo padre; y a los cinco pequeños que le esperaban en casa para abrazarlo cuando llegaba después de una jornada laboral.

Hay silencio en el ambiente, el cual es roto por los aplausos de los acompañantes que esperan iniciar el cortejo fúnebre, pero que antes acudirán a misa a la iglesia de La Asunción.

Han pasado 48 horas de la tragedia que puso de luto a Xalapa, la que cobró la vida de casi una familia completa, en la que murieron la madre y los cinco hijos, y quedó con vida el padre de familia Adán Moreno.

En Xalapa, tras el paso del huracán Grace la lluvia torrencial y los vientos cesaron; pero dejó un ambiente de dolor y de exigencia de justicia social por parte de los vecinos de Loma Bonita, tras la muerte de Dora Isabel, de 27 años de edad; Kevin de 9 años de edad; Cristofer de 5 años; Axel Jair, de 4 años; Alexa de 3 años; y María Fernanda, de 15 días de nacida.

En la noche del sábado se realizó el velatorio en la calle Ignacio Elizondo, en la casa marcada con el número 9, de la colonia Revolución, y a las 14:00 horas de este domingo, hasta ahí llegaron tres carrozas de funerarias para trasladar los cuatro ataúdes color blanco que llevan a los niños, y uno de color café en el que va su mamá, a la iglesia de La Asunción.

 

OLOR A TRISTEZA

 

Es medianoche y los féretros de Dora y los pequeños Kevin, Alexa, Jair, María Fernanda y Cristofer llegan a la casa donde serán velados.

La entrada de tres carrozas tiene dificultades para acomodarse y entrar por la estrecha puerta ante la mirada atenta de decenas de curiosos. Adentro, el padre de los niños espera sentado con un llanto que apenas se percibe, le han tenido que dar alcohol y un suero para recuperarse y tomar fuerzas para recibir a su familia, que murió tras un derrumbe que arrasó su casa en la colonia Loma Bonita, tras el paso del huracán Grace. La primera carroza trae el cuerpo de Dora Isabel, de 27 años, junto con el de María Fernanda, quien tenía apenas 15 días de nacida. En la segunda carroza viene el cuerpo de Kevin, Axel y Alexa, de 9, 4 y 3 años, respectivamente; el de Cristofer, de 5 años, es el último que entra a casa. En total cinco féretros blancos donde con un plumón negro han tenido que escribir el nombre de los pequeños para no confundirse. Para acomodarlos en la pequeña habitación que no alcanza los 20 metros, la familia ha tenido que sacar las sillas, las coronas de flores del Gobierno del Estado y del Ayuntamiento y ha acomodado en un esquina el altar con veladoras y la fotografía de Dora y los niños. El padre, un joven que se dedicaba a la venta de fierro viejo recibe los féretros acompañado de su familia. “Llora, es lo que te hace falta”, le repiten mientras él no emite palabra.

Son las 12:14 y la familia cierra la puerta y las cortinas, piden a los curiosos y amigos respeto, a los medios que no tomen fotos ni graben videos. La llovizna se ha soltado de nuevo y hace que los visitantes se refugien en las dos carpas que cerraron por completo la vialidad en la calle. La noche será larga, pero la gente sigue llegando, conocidos y desconocidos se solidarizan con la familia, llegan con café, comida, tamales, velas, flores, pambazos, mientras dan sus condolencias por la tragedia.