Juan Carlos Jiménez B.
Tlapacoyan, Ver.- Es importante prevenir los golpes de calor, ya que los más afectados por una fuerte insolación o deshidratación, son los niños, mujeres embarazadas y adultos mayores, para esto hay que evitar una exposición directa sin protección ante los rayos del sol y garantizar una hidratación correcta, de protegerse con gorros y ropa fresca, transpirable y de colores claros.
Evitando también realizar ejercicios físicos intensos en sus hogares, en las horas de más calor, en casa hay que permanecer con las cortinas o persianas, bajadas y procurar refrescarse con ventiladores, aire acondicionado a una temperatura suave y duchas.
El golpe de calor es cuando el cuerpo es expuesto al sol o actividades al aire libre, que incluyen ejercicios físicos que ponen demasiado caliente al cuerpo y lo más probable es que se esté frente a un golpe de calor.
Esto se podrá identificar a través del reconocimiento de síntomas claves como: sentirse débil, mareado, tener dolor de cabeza, aceleración de los latidos del corazón, náuseas, vómitos y debilidad muscular o calambres, además de lo anterior, se puede sufrir deshidratación y hacer poca orina.
Estos síntomas a los que hay que poner atención son: confusión, fiebre, dolor intenso de cabeza, náuseas y vómitos, sensación de debilidad, sed, orina oscura, pulso débil, respiración más lenta de lo normal, sensación de vértigo, calambres musculares y alteraciones visuales o auditivas, en casos muy avanzados se pueden llegar a tener convulsiones y pérdida de consciencia.
Pueden ser graves las consecuencias de los descuidos con el sol, hay que prevenir y estar alerta en caso de que se presente un golpe de calor o insolación, siempre hay que conocer las medidas que hay que tomar para prevenir, reaccionar y curar, en caso de presentar algunos de estos síntomas es importante acudir de manera rápida con el médico.