Juan Carlos Jiménez Benavídez
La vialidad en este municipio se encuentra de cabeza, esto debido a que un sinnúmero de personas violan el reglamento de tránsito sin que las autoridades del ramo hagan algo.
Claro ejemplo de los vehículos, que a pesar de existir un señalamiento vial de no estacionarse lo violan y se burlan de las autoridades de tránsito, las cuales a pesar de ello no hacen nada por mover o aplicar alguna infracción a los infractores del reglamento.
También se ven perjudicados por la violación al reglamento de tránsito, son las personas discapacitadas, a quienes les obstruyen sus accesos para ascender a las aceras.
Quedan desprotegidas las personas discapacitadas y los transeúntes, ya ni se han aplicando “operativos nocturnos” para detener a motociclistas o vehículos con exceso de velocidad, esto por la falta de personal que sigue teniendo este municipio y no hay quien gestione recursos humanos.
De esta manera queda de manifiesto que el reglamento de tránsito no solamente lo violan los ciudadanos, sino también los mismos encargados de aplicarlo en este municipio y uno que otro funcionario municipal.