Esta Iniciativa se enriquece con propuestas de grupos ambientalistas y protectores de animales, explicó el diputado Juan Eduardo Robles
Xalapa, Ver.- La Iniciativa de Ley de Bienestar Animal para el estado es un proyecto que trasciende las consideraciones sobre protección animal o trato humanitario, y en su conjunto busca castigar de forma severa a quienes los maltraten o lastimen, sostuvo el diputado local Juan Eduardo Robles Castellanos.
Durante una entrevista, el coordinador de la fracción legislativa del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) manifestó que esta ley se debe interpretar armónicamente y en su conjunto, pues cada artículo forma parte de un todo, y de esta manera se pueden evitar interpretaciones erróneas o inapropiadas.
Robles Castellanos indicó que luego de algunos señalamientos de grupos ambientalistas y sociedades protectoras de animales respecto de esta ley, se encuentra en reuniones de trabajo con estas organizaciones para enriquecer, aportar y afinar esta propuesta que opta por el bienestar animal.
También reconoció que es urgente modernizar la legislación en Veracruz para trascender hacia una nueva cultura de protección y trabajar en beneficio de todos los tipos de animales: domésticos, de trabajo, los utilizados en espectáculos, de producción, etcétera.
Explicó que en los artículos que componen esta Iniciativa se advierte que los animales domésticos o de compañía no son la materia específica de regulación de esta ley, que se enfoca a los escasamente considerados en la legislación actual, y que por ello carecen de condiciones mínimas de bienestar.
En atención a las libertades que comprende el bienestar animal –continuó Robles Castellanos–, específicamente lo que se refiere a la matanza y eutanasia, se busca garantizar una muerte digna, sin dolor y sin sufrimiento.
El Legislador del PVEM aclaró que ese apartado regula las condiciones y casos en los que se podrán llevar a cabo la muerte y eutanasia, y subrayó que se expresa claramente que sólo se practiquen en situaciones extraordinarias, cuando el sufrimiento y dolor sea de tal magnitud, que se opte así por su bienestar.
“Esta Ley trata de parar las prácticas de muerte y eutanasia altamente dolorosas para los animales, como las que se hacen a través del envenenamiento, la asfixia o con instrumentos punzocortantes, entre otras, y garantizar que estén plenamente justificadas para evitar un dolor o sufrimiento mayor”.
Robles Castellanos aseveró que cada facultad conferida por esta ley a las autoridades municipales y estatales se supedita a los principios y directrices que expresa claramente, y en ningún momento permite actos de intransigencia o barbarie, contrarios a los parámetros de protección y bienestar animal.