Angustia, miedo, desesperación y coraje vivieron familiares de los trabajadores que permanecen desaparecidos y que desde las primeras horas de ayer, se apostaron a la entrada de Petroquímica Mexicana de Vinilo (PMV).
Ante la impotencia y el temor a que les ocultaran información, alrededor de las 11:00 horas impidieron el ingreso de dos volteos del Ejército Mexicano, además de que a un convoy de tres camiones les pararon el paso, pero el conductor de una hizo caso omiso y les aventó el vehículo, lo que desató una batalla campal.
A pedradas y con lo que encontraran lo persiguieron alrededor de 50 metros y pararon la unidad y bajaron a sus ocupantes, quienes argumentaron que eran representantes sindicales.
Los familiares, con el apoyo de trabajadores revisaban cada uno de los vehículos que ingresaban a la planta para evitar que sacaran cualquier cuerpo de Clorados III.