*Derechohabientes y trabajadores del instituto denunciaron maltrato.
Juan David Castilla Arcos
Xalapa, Ver.- Derechohabientes protestaron en la clínica 11 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) para exigir que cese el maltrato y las omisiones por parte del personal del mismo.
De acuerdo con el secretario general del Sindicato Liberal de Trabajadores al Servicio del Poder Ejecutivo del Estado de Veracruz, Luis Manuel González García, se ha estado negando el servicio médico a los trabajadores.
"Parece que cuando venimos a pedir consulta, parece que estamos pidiendo limosna. Consideramos que no es posible, ya que todos los trabajadores que nos atienden perciben un salario muy digno, el cual se forma por las cuotas que nosotros pagamos".
Los inconformes se plantaron en la explanada de las oficinas mencionadas, para que el delegado del IMSS, zona Veracruz-Norte, Antonio Benítez Lucho, atendiera sus peticiones.
“Ya no aguantamos más, la gente del sindicato está cansada de tanto maltrato, por eso es que venimos de manera muy pacífica, muy respetuosa, pero sí venimos a exigir que las autoridades que nos puedan resolver la problemática se sienten en una mesa de diálogo para que podamos manifestarle cada uno de los casos especificó", agregó el líder sindical.
El entrevistado detalló que cuando presentan una receta médica, el personal de farmacia argumenta que carecen de los medicamentos necesarios para dotar a los pacientes.
“Merecemos más camas, más medicamentos, mejor trato en el IMSS” y “exigimos trato digno para los derechohabientes del IMSS”, se leía en las cartulinas que sostuvieron con dirección a las oficinas administrativas de la clínica mencionada.
“Tenemos casos donde los pacientes han tenido que comprar los medicamentos por años, son medicamentos caros, siempre que llegamos con una receta médica, no existe el medicamento, nos tenemos que ir y ni modo que nos muramos; tenemos que pagar en la farmacia, entonces para qué tenemos el seguro social”, refirió González García.
Los derechohabientes amagaron con permanecer en el lugar hasta ser atendidos por el delegado del IMSS, en busca de una solución.