Yhadira Paredes
Xalapa
La decisión de Javier Duarte de Ochoa de separarse del encargo fue tomada a destiempo, pero se confía en que se termine el “jaloneo político” en la entidad veracruzana que daña la economía interna, que sigue entrampada, aseguró el expresidente del Consejo Coordinador Empresarial de Veracruz (CCEV), Jesús Castañeda Nevárez.
El empresario veracruzano consideró que una vez fuera del Gobierno del Estado, estos “jaloneos” ya no significarán una situación de riesgo para la economía y la sociedad.
Asimismo, indicó que podría ser Flavino Ríos Alvarado quien asuma la gubernatura del Estado, para que en estos últimos días de gobierno haya una ruta final lo más sana posible.
“La renuncia del gobernador llega a destiempo porque un vez que se empiezan a revelar una serie de irregularidades, uno pensaría que este es el mejor momento en que podría hacer hecho esto, pero desde luego hay que conceder que no siempre que haya señalamientos significa que uno sea responsable”.
En ese sentido, indicó que se debe esperar a desahogar todas las investigaciones y una vez que se aclaren, tomar las acciones de justicia pertinentes.
Consideró que la decisión de Duarte de Ochoa liberará un poco la tensión, principalmente por el forcejeo político entre el equipo saliente y el próximo gobierno.
“Toda esa incertidumbre que campea en todo Veracruz está generando mucho daño a la economía, principalmente porque la economía interna no se activa, está estancada y no tenemos tampoco un impacto de la economía externa federal. Todo esto producto de un forcejeo de poderes y de fuerzas política que yo espero que con la salida del gobernador haya una distensión”.
Sobre la posibilidad de que la situación de agresiones entre Javier Duarte de Ochoa y el gobernador electo, Miguel Ángel Yunes Linares, aumente de nivel tras la aprobación de la licencia, sostuvo que al ser un gobernador con licencia afrontará los señalamientos, pero ya sin el respaldo del Gobierno Estatal.
DEBE HABER QUIEN DÉ LA CARA POR EL GOBIERNO
El expresidente del CCEV indicó que ahora, una vez que el Congreso autorice la licencia del mandatario, habría que analizar quién dará la cara por el Gobierno y agarrará el timón del barco para que los días que le quedan puedan ser distintos.
En ese sentido, manifestó que el actual secretario de Gobierno, Flavino Ríos Alvarado, podría ser la mejor opción para finalizar la administración estatal duartista.
Finalmente, indicó que la evaluación popular no beneficia al gobernador Javier Duarte de Ochoa, aunque es subjetiva, porque se basa en las apreciaciones, aunque hay una evaluación contundente a las que no se puede negar la razón y que lo tiene en baja estima: la economía.
“Estamos en una situación realmente dramática, en niveles de desesperación para muchos, y el responsable es el Gobierno y la figura del Ejecutivo estatal”.