En el caso de los jóvenes acusados de abuso sexual en contra una menor de edad.
Rodrigo Barranco Déctor
Veracruz, Ver.- El fiscal general del estado de Veracruz, Jorge Winckler, trabaja como juez y parte en el proceso que se lleva en contra del joven Diego Cruz Alonso, uno de los señalados como integrante de la banda Los Porkis de Costa de Oro.
El abogado defensor del acusado, Miguel Acosta Villa, acusó que el funcionario acudió el viernes a la declaración de su cliente en el Juzgado Primero de Primera Instancia, en la ciudad de Veracruz, en un claro afán intimidatorio en contra de las autoridades judiciales.
Recordó que Winckler, antes de ser nombrado fiscal del estado, era el abogado defensor de Daphne Fernández, la presunta víctima de Los Porkis, por lo que consideró que ahora hay un conflicto de intereses y tráfico de influencias en el caso.
“Es preocupante su presencia allí, porque es obvio que fue con un fin específico, la de intimidar a los que participábamos en esas dirigencias, para intimidar o coaccionar a la autoridad judicial, en este caso el juez”.
“Lo más preocupante y que más me llama la atención es que él llega en unidades que le proporciona la Fiscalía, así como con su cuerpo de seguridad, es decir, llega utilizando los recursos públicos para litigar sus asuntos particulares. Acude como defensor de la familia Fernández y acude como fiscal”.
Diego Cruz llegó al puerto de Veracruz la semana pasada tras su extradición por el gobierno de España, para que afronte a la justicia local por su presunta participación en el abuso sexual y pederastia en contra de una menor de edad en enero de 2015.
Hasta el momento hay dos personas detenidas por estos hechos, en espera de resolutivo, y uno más, Jorge Cotaita, permanece prófugo de la justica.
