Tienen preferencia de visitas al interior del Reclusorio; familiares de otros recluidos esperan por largas horas bajo el sol poder ingresar un poco de comida y ropa limpia.
Juan David Castilla Arcos
Xalapa
Custodios y administrativos del penal de Pacho Viejo privilegian al extitular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), Arturo Bermúdez Zurita, y al líder del Movimiento de Los 400 Pueblos, César del Ángel Fuentes.
Familiares de reclusos denunciaron un trato preferencial en el Centro de Reinserción Social (Cereso), para el exfuncionario del gobierno priista encabezado por el prófugo Javier Duarte de Ochoa, quien fue recluido desde el viernes pasado, y el dirigente de la agrupación, afines al Partido Revolucionario Institucional (PRI).
"Este mensaje es para el gobernador Yunes, que dijo que no habría preferencias, las preferencias están desde el domingo, que no nos dejaron entrar, tardamos más de dos horas para ver a nuestros familiares", manifestó la madre de un preso, quien solicitó el anonimato por temor a represalias.
Este martes, nuevamente tuvo que esperar varias horas para ingresar al área de visitas y entregarle comida a su hijo.
"No hay paso porque Bermúdez tiene a sus familiares, tiene abogados y nos dejan pasar a los locutorios".
Los locutorios son las cabinas que disponen de un teléfono público, de uso individual, lugares que fueron restringidos porque Bermúdez Zurita, mejor conocido como "capitán tormenta", pidió a la jueza del cuarto juzgado de control en Pacho Viejo, Verónica Portilla Suazo, ser aislado de la población interna por temor a ser agredido.
"Eso no es justo, yo lo único que traía es un poco de sopa para mi hijo y no me dejan pasar, que hasta que se desocupen los abogados de Bermúdez. No se me hace justo y este mensaje ojalá se lo hagan llegar a Yunes".
El domingo pasado se saturó la zona y la fila de personas se observaba desde el módulo de revisión a los juzgados.
"Ellos entraron directamente (allegados a Bermúdez), no pasan a revisión, no les revisan la comida, mientras a nosotros nos exigen que hagamos sentadillas y esperar horas para ingresar. Es injusto, al final de cuentas todos los que están acá son delincuentes", culminó la señora.