Los diputados locales aprobaron la armonización de la ley educativa con la reforma federal que llevaba parada más de dieciocho meses.
A cinco días del vencimiento del plazo otorgado por la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), el Congreso de Oaxaca aprobó la armonización de la ley educativa con la reforma federal.
Minutos antes de la media noche del sábado, 28 diputados de los partidos Revolucionario Institucional (PRI), Acción Nacional (PAN), Nueva Alianza (Panal), Movimiento Ciudadano (MC) y Unidad Popular (PUP) avalaron el dictamen que llevaba cerca de año y medio en análisis.
El cumplimiento del mandato de la Corte se llevó a cabo entre reclamos de legisladores del Partido de la Revolución Democrática (PRD) y de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), al no ser convocados a la sesión extraordinaria en la sede Legislativa.
Dentro del dictamen aprobado, el artículo 69 establece que se aplicarán todas las normas de la Ley General del Servicio Profesional Docente, con lo que se termina con la herencia de plazas docentes y se establece la obligatoriedad de evaluación para los más de 80,000 profesores de Oaxaca.
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Ante la posibilidad de manifestaciones en rechazo por parte de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), decenas de elementos del grupo Antimotines de la Policía estatal fueron desplegados desde la tarde del sábado en los alrededores y el interior de la Cámara de Diputados local.
Rubén Núñez Ginez, dirigente de la CNTE, llegó a la sede legislativa acompañado de una decena de trabajadores de la educación, para protestar en contra de la aprobación de la nueva ley educativa para el estado.
Anunció que en las próximas horas, el magisterio nacional determinará la ruta jurídica y política a seguir ante lo que calificó como una “traición” de los diputados al pueblo de Oaxaca.
