Sinaloa, Morelos, Baja California y Baja California Sur, son otras de las entidades menos pacíficas.
Guerrero es la entidad menos pacífica del país, según los recientes resultados del Índice de Paz México, producido por el Instituto para la Economía y la Paz.
El dato coincide con las cifras oficiales de violencia, que colocan a la entidad como el estado donde más homicidios dolosos se cometen.
Aunque se encuentra por debajo del Estado de México, si se toman en cuenta la cantidad de asesinatos por cada 100 mil habitantes, Guerrero es el lugar más violento.
En enero y febrero de este año se denunciaron 326 muertes violentas. En 2015, se reportaron 2 mil 16.
Las entidades menos pacíficas, según el IPM, son las siguientes: Guerrero, Sinaloa, Morelos, Baja California y Baja California Sur.
El índice sobre lo ocurrido el año pasado, apuntó que “alrededor de 85% de los mexicanos viven en estados que son más pacíficos hoy que en 2011. Los cinco estados con mayores avances en sus niveles de paz en los últimos cinco años son Nayarit, Durango, Nuevo León, Chihuahua y Baja California. En 2011, estas entidades se encontraban entre los siete estados menos pacíficos”.
Otro aspecto que destaca el estudio es la tendencia hacia una mayor impunidad en homicidios, “que se deterioró drásticamente a partir de 2007. En ese año había cuatro condenas por cada cinco casos de homicidio, pero hacia 2013 sólo había una condena por cada cinco casos. Esto, aunado al aumento de presos sin condena, revela la saturación del sistema judicial, como también lo indican las estadísticas de sobrepoblación en las cárceles”.
Además, llamó a mejorar la confiabilidad de los datos oficiales, pues “existen por lo menos tres factores que cuestionan las estadísticas oficiales de la delincuencia: 93% de algunos delitos no se denuncian; hay una discrepancia del 20% en 11 estados, entre las víctimas de homicidio registradas por el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) y las registradas por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) basadas en actas de defunción; además, no incluyen a las 26,000 personas reportadas como desaparecidas desde 2007 por el Registro Nacional de Datos de Personas Extraviadas o Desaparecidas (RNPED), un número que se considera conservador”.
“El país tiene la oportunidad de alcanzar mejores niveles de paz, sin embargo, se requiere enfrentar dos problemas fundamentales: la administración de la justicia y la corrupción. Mejoras en ambos, temas traerán grandes beneficios ya que en los estados menos pacíficos, se percibe mayor corrupción,” señaló Patricia de Obeso, coordinadora del IEP en México.
“Observar la violencia en México a través del enfoque de Paz Positiva, permite entender como un país puede mejorar en sus niveles de paz. Desde 2011, la mayoría de los estados han mostrado avances. Dichos avances se concentran en los estados con mayor Paz Positiva, donde hay más resiliencia a la violencia del narcotráfico,” dijo Steve Killelea, presidente del Consejo del IEP.
Pese a los niveles de violencia en Guerrero, el gobernador Héctor Astudillo sugirió, la semana pasada, un “pacto de silencio” a reporteros en temas de seguridad.
